Venezuela acepta la decisión de Colombia
Venezuela aceptó este jueves con frustración la decisión "soberana", aunque "lamentable", de Bogotá de dar por finalizado el papel de mediador del presidente Hugo Chávez en un acuerdo humanitario de liberación de rehenes en manos del grupo guerrillero colombiano FARC.
El Gobierno colombiano puso fin el miércoles en la noche a la facilitación por considerar que Chávez excedió sus funciones al contactar con un general colombiano y revelar públicamente detalles sobre el proceso.
"Venezuela acepta esta decisión soberana del Gobierno de Colombia, pero manifiesta su frustración dado que de esta manera, se aborta un proceso que se venía llevando con pulso firme en medio de grandes dificultades, habiéndose obtenido en apenas tres meses importantes avances", dijo la Cancillería en un comunicado.
La decisión del presidente de Colombia, Alvaro Uribe, apagó las esperanzas de los familiares de 49 rehenes en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), quienes confiaban en los oficios del mandatario venezolano para lograr la libertad de sus seres queridos.
En el comunicado, el Gobierno venezolano pide a los familiares de los secuestrados que tengan "fe, primero en Dios y luego en el buen juicio de quienes tienen en sus manos el poder para tomar a tiempo sabias rectificaciones y decisiones posteriores".
El inesperado anuncio supone un revés para Chávez, inmerso en una dura campaña electoral para aprobar una controvertida reforma constitucional, quien se había mostrado optimista sobre las posibilidades de lograr la liberación de los rehenes, entre ellos la política franco-colombiana Ingrid Betancourt.
Caracas calificó de "lamentable" la decisión al considerar que los avances obtenidos por Chávez "hacían pensar ya, en la posibilidad de una solución a este drama esencialmente humano que afecta a nuestra hermana y querida Colombia", según el comunicado.
