Evo: no atento contra la democracia
El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró el martes que su gobierno no ha violado los derechos humanos y pidió una investigación internacional por las muertes de tres civiles durante una protesta en la ciudad de Sucre hace tres semanas y que adjudicó a grupos que buscan desprestigiarlo.
''No estamos atentando contra la democracia ni tenemos políticas que violen los derechos humanos'', dijo Morales durante un breve discurso en la cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Países Asociados celebrada el martes en Montevideo.
''Yo no sabía que era tan sucia la política. Me acusan de asesino, pero han pasado tres semanas y no hay informe ni autopsia... Quisiera una investigación internacional que vaya y se diga la verdad'', añadió el mandatario, quien aseguró que ''hay grupos que infiltran gente (en las protestas) para matar, para querer desprestigiar al gobierno''.
Las protestas se han multiplicado en Bolivia en las últimas semanas en medio de un clima de extrema tensión política tras la aprobación de un nuevo proyecto de constitución impulsado por Morales.
La nueva carta constitucional, que deberá ser refrendada en un plebiscito popular, fue desconocida por cinco regiones, cuatro de las cuales anunciaron que se declararán autónomas del poder central.
Durante una de esas protestas en Sucre, el 24 de noviembre, tres civiles murieron durante enfrentamientos entre la policía y lugareños opositores a la Asamblea Constituyente. El lunes pasado, el gobernador del sureño departamento de Chuquisaca, David Sánchez, presentó su renuncia irrevocable al cargo a causa de esos disturbios y se asiló con su familia en Perú.
''Hemos sido acusados de todo, desde narcotráfico hasta terroristas... Es una provocación y agresión con tintes racistas'', dijo Morales.
''Hay grupos que no aceptan que sólo los pobres pueden dedicarse a los pobres'', concluyó.
