Turquía ataca a rebeldes en Irak

Aviones de guerra turcos bombardearon blancos de la guerrilla kurda en el norte de Irak, informaron fuentes de ambos países.

El Ejército turco dijo que continuará su ofensiva contra los guerrilleros del separatista Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK) dentro de Turquía y cruzando la frontera en el norte de Irak.

"Aviones caza pertenecientes a las fuerzas armadas turcas dieron exitosamente contra blancos pertenecientes a la organización terrorista a tempranas horas del 26 de diciembre", dijo el Ejército en una declaración, agregando que ocho escondites del PKK en el valle Zap fueron atacados.

Jabbar Yawar, portavoz de las fuerzas de seguridad de Peshmerga de la semi autónoma región kurda de Irak, dijo que el ataque duró cerca de una hora en una montañosa región fronteriza de la provincia de Dahuk, pero no ocasionó bajas.

Las redadas fronterizas son un recordatorio de que mientras la violencia en Irak ha disminuido desde junio, la seguridad es frágil y el país enfrenta amenazas locales y del exterior.

Turquía dice que tiene el derecho bajo la ley internacional de atacar a rebeldes que se refugien en el norte de Irak y de desplegar ataques en los cuales han resultado muertas decenas de tropas turcas en los últimos meses.

Aviones turcos también atacaron los días sábado, domingo y martes, los últimos incidentes en una campaña que comenzó con el bombardeo en una redada más amplia el 16 de diciembre.

Varios cientos de tropas terrestres tanto como artillería de largo alcance han sido utilizadas también en las las redadas fronterizas.

Cientos de civiles han huido de las aldeas iraquíes en el área fronteriza y funcionarios kurdos iraquíes han dicho que se han registrado muertes. Turquía niega tales declaraciones.

La guerra

Turquía dice que sus redadas están destinadas exclusivamente contra los guerrilleros del PKK.

El Ejército turco dijo que más de 150 guerrilleros del PKK resultaron muertos en los ataques aéreos del 16 de diciembre a través del norte de Irak. Los ataques se realizaron a centros de mandos del PKK, campamentos de entrenamiento y logística y más de 180 residencias, dijo el Ejército.

Funcionarios iraquíes kurdos dicen que los ataques tuvieron como blancos aldeas abandonadas cerca de la frontera turca y áreas montañosas desiertas. El PKK negó que su infraestructura haya sido destruida o que sus miembros hayan resultado muertos.