México y Japón unidos por la ONU
México y Japón se apoyarán mutuamente con sus respectivos votos cuando el Consejo de Seguridad de la ONU se reúna próximamente para determinar qué países se integrarán con lugares no permanentes en el periodo de 2009-2010.
Así lo acordaron este viernes los secretarios de relaciones exteriores de México Patricia Espinosa y de Japón Taro Aso en una reunión de trabajo.
''Esta reunión es una muestra del excelente estado de las relaciones entre México y Japón, dos naciones que se profesan respeto y afecto y que mantienen una amistad antigua y continua'', dijo Espinosa en rueda de prensa.
México fue miembro del Consejo de Seguridad del 1 de enero de 2002 al 31 de diciembre del 2003.
Durante ese período, México se opuso a una acción militar estadounidense en Irak, lo que le valió un distanciamiento con Washington, que en voz del entonces secretario de estado Colin Powell calificó como una ''decepción'' la posición mexicana.
Japón y México también acordaron fortalecer juntos sus esfuerzos contra el calentamiento global, mediante el intercambio de tecnología que permita reducir sus emisiones de gases sin que eso implique un freno para el crecimiento económico.
México ocupa el 12do. lugar en la lista de países con mayores emisiones de CO2.
''Estamos muy contentos de que México haya expresado su intención de participar activamente en la lucha contra el calentamiento global'', señaló Aso.
Las partes acordaron además celebrar en grande en el 2009 ''los 400 años del primer contacto entre nuestros pueblos'' con un ''verano de México en Japón'' mediante el cual habrá un intercambio de ''actividades culturales, artísticas, de promoción cultural y turísticas''.
Desde que ambas naciones firmaron un Acuerdo de Asociación Económica en el 2005, Japón se convirtió en el tercer socio comercial de México, y el comercio creció más de un 70%, lo que se tradujo en 16,800 millones de dólares, dijo Espinosa.
Previo a esa reunión Aso tuvo un encuentro con el presidente Felipe Calderón, quien extendió invitaciones al Emperador Akihito y a la Emperatriz Michiko para que visiten México con motivo de las celebraciones del Bicentenario de Independencia a celebrarse en el 2010.
