Incendio en NY rememora ataques de 11-9
Un incendio importante en un rascacielos abandonado cerca de la zona en la que se derrumbó el Centro de Comercio Mundial renovó recuerdos dolorosos de los ataques terroristas del 11 de septiembre del 2001.
Para los bomberos, el incendio del sábado en el ex edificio de oficinas del Deutsche Bank, sumó más muertos: dos socorristas fallecieron mientras intentaban extinguir las llamaradas.
El humo proveniente del incendio de la torre, que permanecía desocupada desde los atentados del 2001, generó nuevos temores de riesgos para la salud similares a los de aquella vez. Las autoridades, sin embargo, dijeron que los exámenes preliminares mostraron que no había peligro.
La humareda había desparecido casi por completo el domingo, dejando al descubierto las ventanas rotas y las maderas quemadas en el edificio desierto.
''Nuestra ciudad ha trabajado duro para recuperarse de aquel día horrible de septiembre de hace casi seis años, y los hechos tristes de hoy han extendido el sacrificio que la ciudad y el departamento de bomberos han hecho'', expresó el alcalde Michael Bloomberg el sábado, mientras cientos de bomberos trabajaron durante más de siete horas para extinguir las llamaradas.
Los exámenes para determinar la calidad del aire continuaban el domingo. El piso 17 del edificio, donde comenzó el fuego, aún no había sido limpiado y tenía restos tóxicos, dijo el portavoz de la Agencia de Protección Ambiental Bonnie Bellow.
Pero Bloomberg buscó garantizarle a los pobladores que los asbestos y otras sustancias tóxicas del edificio depositadas allí por el colapso de las Torres Gemelas, no representaban un riesgo importante para la salud.
Las primeras pruebas de calidad de aire realizadas el sábado mostraron que ''no vemos daños para la gente del vecindario'', expresó en una rueda de prensa. La estructura del edificio estaba segura y no corría riesgo de caerse, indicó el alcalde.
Las agencias estatales trabajaban con el municipio para determinar la causa del incendio y ''tomar todas las precauciones necesarias'', expresó el gobernador Eliot Spitzer en un comunicado.
