Henriette va hacia Sonora y Sinaloa
El huracán Henriette comenzó a azotar el miércoles estados agrícolas en México con fuertes lluvias y vientos, luego de haber castigado al exclusivo balneario de Los Cabos a orillas del Pacífico.
Henriette, un relativamente débil huracán de categoría 1 que dejó siete muertos -incluyendo a una turista extranjera- en su camino por las costas del Pacífico, se adentró por el Golfo de California con vientos máximos de 120 kilómetros por hora.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos advirtió que no se espera que la tormenta cambie de intensidad antes de que el ojo del huracán toque tierra por la tarde o la noche.
Se esperaban grandes oleajes en los estados costeros de Sonora y Sinaloa, donde una tormenta el año pasado arrasó con cultivos de tomate, lo que desató un alza en los precios que fue causa de un breve repunte inflacionario según el Gobierno.
El Centro advirtió sobre el riesgo de olas y lluvias aisladas de hasta 300 milímetros en regiones montañosas. En Hermosillo, capital del estado de Sonora, el fuerte oleaje destruyó un muelle y también obligó al cierre de puertos pesqueros en la costa.
Henriette dejó seis muertos durante el fin de semana con sus lluvias en la costa cerca del popular balneario de Acapulco como tormenta tropical.
Una mujer extranjera murió cuando caminaba el lunes por la playa mientras la tormenta se acercaba y las olas de cuatro metros azotaban la costa a lo largo de la Península de Baja California.
A miles de turistas, en su mayoría de Estados Unidos, se les pidió que se quedaran en sus hoteles y el martes fueron cerrados los aeropuertos de Los Cabos y La Paz.
El operador aeroportuario GAP informó el miércoles que reabrió el aeropuerto de Los Cabos, pero dijo que mantuvo cerrado el de La Paz, capital de Baja California Sur, y el de los Mochis en el norte del estado de Sinaloa en previsión al huracán.
Aunque la tormenta trajo intensas lluvias y vientos al usualmente soleado y desértico estado de Baja California, los servicios de emergencia dijeron que no se reportó ningún daño importante.
Los pobladores de la ciudad de La Paz, que esperaban que pasara la tormenta, fueron sacudidos por un sismo de 5 grados de magnitud en la noche del martes, pero no se reportaron víctimas ni daños.
En el Caribe, las lluvias del huracán Félix empapaban a Honduras el miércoles, amenazando con peligrosas inundaciones y deslaves después de haber dejado al menos 21 muertos a su paso en la vecina Nicaragua.
