EU resalta apertura de transporte
La Cámara de Comercio de Estados Unidos calificó hoy la implementación del programa de transporte transfronterizo como un obligado gesto de reciprocidad del gobierno con México, uno de sus principales socios comerciales.
El presidente de la Cámara, Thomas Donohue, consideró que el acuerdo constituye un importante paso para mejorar la competitividad de los dos países, reducir la contaminación en la frontera común y promover el crecimiento económico.
"Este programa piloto es un paso largamente aplazado que ayudará a reducir la congestión en la frontera", dijo el directivo.
Destacó en particular la obligatoriedad de la medida, contemplada en el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) y aplazada por el gobierno estadunidense cediendo a presiones políticas y del Sindicato de Transportistas (Teamsters), entre otros.
"No tenemos credibilidad pidiendo a otros países a cumplir sus obligaciones bajo acuerdos comerciales si nosotros rehusamos a cumplir las nuestras. Es tiempo de cumplir con nuestra palabra", dijo Donohue.
El Departamento de Transporte de Estados Unidos anunció la víspera que la empresa camionera Transportes Olympic del estado mexicano de Nuevo León podrá ingresar desde esta semana al país como parte del programa piloto transfronterizo.
En reciprocidad, las autoridades de México permitirán el ingreso de la empresa Stagecoach de El Paso, Texas.
El programa piloto contempla incluir en esta apertura inicial a 100 compañías transportistas de México y a 100 de Estados Unidos, las cuales deberán aprobar un proceso de inspección.
Legisladores y grupos independientes reiteraron su oposición a esta apertura, al insistir en que los camiones mexicanos carecen de los estándares de seguridad equivalentes a los de Estados Unidos.
La semana pasada los Teamsters y el grupo Public Citizen buscaron sin éxito bloquear el previsto acceso de los camiones mexicanos.
La Cámara de Representantes aprobó en mayo pasado, por una votación de 411 votos a favor y tres en contra, bloquear el financiamiento para el programa piloto y aún se requiere su aprobación en el Senado.
La administración del presidente George W. Bush apoyó la apertura de la frontera a los camiones mexicanos en condiciones de reciprocidad, para cumplir no sólo con el TLCAN sino con el dictamen de un panel arbitral del acuerdo que falló a favor de México.