Colombia denuncia ataques desde Ecuador
El gobierno de Colombia denunció presuntos ataques de la guerrilla izquierdista desde Ecuador, a la vez que pidió a la justicia de ese país acceso a tres mujeres, entre ellas la mexicana Lucía Morett, que sobrevivieron a un bombardeo a inicios de mes en el que murió uno de los líderes de la guerrilla.
Se trata del más reciente episodio en medio del cruce de declaraciones entre los gobiernos de Bogotá y de Quito, que aún no logran superar una crisis diplomática desatada tras la operación militar colombiana el 1 de marzo en territorio ecuatoriano.
"Esta semana que pasó nos siguieron disparando en contra de los erradicadores de droga en la frontera con el Ecuador y eso por su puesto no podemos aceptarlo", dijo el canciller colombiano, Fernando Araújo.
Colombia mantiene una campaña de erradicación manual de los cultivos de hoja de coca -materia prima de la cocaína- en la zona selvática de su frontera con Ecuador, de 586 kilómetros, en donde la guerrilla tiene fuerte presencia.
El Gobierno del presidente Álvaro Uribe suspendió las fumigaciones de los cultivos ilícitos en la frontera con Ecuador ante los frecuentes reclamos de Quito.
"Ningún gobierno se va a quedar con los brazos cruzados siendo testigo de como sus nacionales son asesinados desde otras fronteras", aseguró Araújo.
Mientras, el fiscal general de Colombia, Mario Iguarán, acudió a la figura de la asistencia judicial para que Ecuador permita que sus funcionarios puedan interrogar a tres mujeres que sobrevivieron al ataque contra la guerrilla.
La solicitud de la Fiscalía General presentada al Ministerio de Relaciones Exteriores para que la tramite ante Ecuador busca establecer la misión que cumplían un ecuatoriano y varios mexicanos en el campamento de las FARC que fue atacado.
"Si la asistencia judicial es recíproca como ha venido sucediendo, la justicia colombiana podrá acceder a estos testimonios claves dentro de la investigación", dijo el funcionario.
La investigación de las autoridades colombianas también trata de aclarar la presencia del ecuatoriano Franklin Aizalia, quien murió en el ataque, lo que provocó una enérgica protesta del gobierno del presidente Rafael Correa.
La Fiscalía busca la autorización para interrogar a una mexicana y dos colombianas que sobrevivieron al bombardeo de las Fuerzas Militares de Colombia sobre una zona selvática de Ecuador, un ataque dirigido en el que murió el líder guerrillero Raúl Reyes y 25 personas más.
Reyes era considerado el segundo hombre en importancia de las FARC, el mayor grupo rebelde izquierdista del país conformado por unos 17,000 combatientes y considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea.
El ataque de las Fuerzas Militares de Colombia fue considerado por Correa como una masacre que violó la soberanía de su país y días después rompió relaciones diplomáticas con Bogotá.
En la crisis, que amenazó con provocar un conflicto en la región, se involucraron Venezuela y Nicaragua que respaldaron a Ecuador.
Aunque la crisis se superó durante la Cumbre del Grupo de Río, en República Dominicana, Quito ha mantenido una actitud crítica frente a Colombia y aún no ha restablecido relaciones diplomáticas.
Mientras, un delegado de la Defensoría del Pueblo de Ecuador y Guillermo Aizalia, padre del ecuatoriano muerto en el bombardeo, llegaron a Bogotá para iniciar los trámites de reparación del cadáver que fue traído a Colombia junto con el de Reyes por los militares que participaron en el operativo.
El canciller colombiano dijo que los documentos como fotografías y vídeos demuestran que el ecuatoriano trabajaba para las FARC.
Pero el padre del ecuatoriano, quien identificó en el Instituto de Ciencias Forenses el cuerpo de su hijo, negó que tuviera nexos con el grupo rebelde.
