México celebra petición de la Corte
México expresó hoy su satisfacción por el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máximo órgano judicial de Naciones Unidas, que pidió a Estados Unidos detener la ejecución de cinco mexicanos condenados a muerte en ese país.
"El gobierno mexicano está satisfecho con la decisión de la Corte Internacional y confía que su ordenanza será cumplida", dijo a Notimex el embajador mexicano en Holanda, Jorge Lomónaco.
La Corte, con sede en La Haya, Holanda, determinó por siete votos a favor y cinco en contra que Estados Unidos debe tomar "todas las medidas necesarias para garantizar que los cinco reos mexicanos no sean ejecutados" hasta que sean revisados de nuevo sus casos.
"México presentó argumentos sólidos", destacó el diplomático al defender la postura de su país, aunque evitó brindar detalles de las audiencias realizadas por ambas partes ante la corte.
El fallo de la CIJ respetó las "medidas provisionales" solicitadas por México a principios de junio pasado para evitar, sobre todo, la ejecución de José Ernesto Medellín, prevista para el próximo 5 de agosto.
Sin embargo, Lomónaco destacó que aún "queda esperar el fallo definitivo sobre la demanda impuesta por México el pasado 5 de junio".
Al respecto, subrayó que el gobierno mexicano "no va a especular" sobre posibles nuevas medidas caso Estados Unidos vuelva a enfrentar la decisión de la CIJ.
La presidenta de la Corte, la jueza Rosalyn Higgins, quien leyó el veredicto tras una vista pública en el Palacio de la Paz en La Haya, indicó que el gobierno de Estados Unidos deberá informar de las medidas tomadas para aplicar esta orden.
El dictamen pide a Estados Unidos preservar la vida de Medellín, César Roberto Fierro Reyna, Rubén Ramírez Cárdenas, Humberto Leal García y Roberto Moreno Ramos mientras siga pendiente el fallo sobre la demanda interpuesta por México.
El gobierno de México solicitó a la CIJ una interpretación sobre el fallo del llamado "Caso Avena" de 2004, que exhortó a Estados Unidos a "revisar y reconsiderar" las penas capitales de 51 mexicanos, cuyos derechos a la notificación consular no fueron respetados.
México recurrió el pasado 5 de junio a la CIJ luego que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos determinó que la doctrina sentada en el "fallo Avena" no es obligatoria para los tribunales de ese país y concluyó que el juicio de Medellín no debía ser revisado.
Ello permitió que se fijara la fecha para la ejecución de Medellín, un ciudadano mexicano sentenciado a la pena capital por el asesinato de dos jovencitas en Houston, Texas, en 1993.
