Calderón pide mantener prevención

El presidente Felipe Calderón Hinojosa convocó a mantener las medidas preventivas para evitar la propagación del virus de la influenza humana, pues aunque se está volviendo a la normalidad "el mal aún no ha desaparecido".   
Sin embargo, expresó, cuando pase la emergencia generada por la influenza humana México será mucho más fuerte, además de que los mexicanos han confirmado una vez más su responsabilidad, solidaridad y capacidad para hacerse cargo del destino propio y de los demás.   
"Esta no es la primera vez que México se ha visto sometido a una prueba tan difícil, ni será la última. Pero son las adversidades las que forjan el carácter de los pueblos y de las personas. Estoy convencido de que cuando pase esta situación México será mucho más fuerte", dijo.   
En la ceremonia por el 147 aniversario de la batalla del 5 de Mayo de 1862, llamó a seguir las recomendaciones que se han hecho, que implican cambios en los hábitos diarios de salubridad e higiene.   
"Todos tenemos una responsabilidad que cumplir para superar esta situación, como tenemos una responsabilidad que cumplir ante cada amenaza y cada riesgo que de cualquier signo se ciña sobre la nación", subrayó.   
En la conmemoración de la Batalla de Puebla, el titular del Ejecutivo federal recordó que México se ha enfrentado a muchas adversidades y de todas ellas ha salido adelante.   
Comentó que, sin duda, la contingencia originada por el virus de la influenza humana ha representado un desafío de magnitud inédita, ante el cual, una vez declarada la emergencia, el sistema de salud ha respondido y funcionado adecuadamente.   
Calderón Hinojosa destacó que en la primera defensa o el primer campo de batalla contra este nuevo mal han estado los hospitales, médicos y enfermeras mexicanas.   
Hizo un reconocimiento a quienes trabajando en el sector salud con actitud valiente han salvado muchísimas vidas, y expuso que con la actuación decidida del gobierno federal y de la población "hemos defendido a toda la humanidad de la propagación de este virus".  
El presidente agradeció a los ciudadanos por su respuesta ejemplar ante esta situación que ha comenzado a estabilizarse, al diminuir notablemente el número de personas contagiadas, y regresar de manera paulatina a la normalidad en los centros educativos y en las actividades económicas y gubernamentales.    
Calderón Hinojosa encabezó al pie del monumento del general Ignacio Zaragoza una inusual conmemoración de la Batalla de Puebla, acompañado sólo por su comitiva, por escoltas del Colegio Militar y del Ejercito mexicano y por medios de comunicación, sin público asistente.   
El mandatario estuvo acompañado por los secretarios de Gobernación, Fernando Gómez Mont; de la Defensa Nacional, Guillermo Galván, y de Marina, Mariano Francisco Saynez; y por los presidentes de la Suprema Corte de Justicia, Guillermo Ortiz Mayagoitia; del Senado, Gustavo Madero, y de la Cámara de Diputados, César Duarte.   
En su discurso, indicó que México enfocó gran parte de su energía en los últimos días a hacer frente a esta nueva enfermedad desconocida a nivel mundial, que apenas hace unas semanas no era identificada por los científicos.   
Comentó que en el curso de la historia de la humanidad, amenazas como ésta de virus nuevos que surgen han dejado incluso millones de personas contagiadas o muertas.   
Por eso, dijo, el gobierno federal tenía que actuar con firmeza y con prontitud con la única prioridad de proteger a los mexicanos, y afortunadamente la federación y los estados se estaban preparando para la eventual llegada de un mal semejante.   
De esta forma, agregó, se pudo saber con rapidez que esta nueva enfermedad es curable si se detecta a tiempo, además de que se contaba con el Plan Nacional de Preparación y Respuesta ante una pandemia de influenza y con una reserva estratégica de más de un millón de tratamientos.    
En su mensaje, el presidente Calderón sostuvo que las amenazas pueden cambiar, como cambian las circunstancias históricas, pero lo que es y debe ser inmutable es el amor a México y la profunda convicción de proteger a la nación y de hacer sacrificios ante cualquier adversidad que la haga peligrar.