Ferrari se luce en Bahréin
El brasileño Felipe Massa ganó el domingo el Gran Premio de Bahréin de Fórmula Uno por segundo año consecutivo, liderando un "uno-dos" de Ferrari que permitió a su compañero de equipo, Kimi Raikkonen, convertirse en el nuevo líder del campeonato mundial.
El polaco Robert Kubica, quien largó desde la "pole position", se subió al tercer escalón del podio, al término de una anodina competencia.
Massa consiguió la sexta victoria de su trayectoria deportiva en la F1 en el circuito del desierto de Sakhir y sumó sus primeros puntos de la temporada.
De esta manera, el brasileño lanzó en Bahréin su campaña en busca del título, como había ocurrido el año pasado, cuando también logró un triunfo aquí.
"La carrera fue realmente difícil al principio, había mucho aceite en la pista", comentó Massa, quien agregó que luego, durante la competencia, su monoplaza se comportó "muy bien" y no tuvo que exigirlo al máximo.
"Las últimas semanas no fueron sencillas para mí, pero así es la vida. No fue la primera vez que ocurre, ni será la última", expresó, en referencia a las presiones que soportó después de sus abandonos en Australia y Malasia.
Mientras, el campeón del mundo, el finlandés Raikkonen, celebró su podio número 50 y pasó a liderar el certamen de pilotos con 19 puntos, tres más que Nick Heidfeld, de BMW Sauber, aprovechando que el británico Lewis Hamilton finalizó relegado, con un McLaren.
Hamilton, su compañero de equipo, Heikki Kovalainen, de Finlandia, y Kubica están empatados con 14 unidades, al cabo de tres carreras en el 2008.
Tarde de pesadilla
"Quería ganar, pero hemos estado un poco alejados de la punta este fin de semana", dijo Raikkonen.
"A pesar de todo estoy primero en el campeonato, así que si puedo llegar segundo en un mal fin de semana, no estoy muy decepcionado", añadió el "Hombre de Hielo".
Hamilton sufrió una tarde de pesadilla y finalizó decimotercero, con una vuelta menos que las Ferrari. El inglés largó en forma agónicamente lenta y luego embistió a su ex compañero de escudería Fernando Alonso, quien ahora conduce un Renault.
El incidente dañó parte del auto del británico, lo que le hizo perder aún más tiempo al entrar en boxes.
McLaren también fue despojado del primer puesto en el mundial de constructores, que ahora encabeza BMW Sauber, con 30 unidades.
Además de la tercera posición de Kubica, el primer piloto de BMW que logra una "pole position" en la F1, el germano Heidfeld terminó cuarto.
El equipo consiguió podios en las tres pruebas disputadas en esta temporada, un logro que no pudieron igualar Ferrari (29 puntos) ni McLaren (28).
Kovalainen finalizó quinto, por delante del italiano Jarno Trulli, de Toyota, y el austríaco Mark Webber, de Red Bull. El alemán Nico Rosberg fue el último en entrar en la zona de puntos, al comando de un Williams.
El español Alonso, dos veces campeón del mundo, apenas llegó en la décima colocación.
Massa lideró desde el comienzo tras superar a Kubica en la largada y escaparse del polaco. Al cabo de un monótono paseo de 57 vueltas, el sudamericano cruzó la meta con 3.3 segundos de ventaja sobre Raikkonen.
"Tuve dos días malos en las dos primeras carreras (del año), pero siempre supe que éramos rápidos", completó el brasileño.
