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Muda tu empresa y sobrevive al intento

Para hacer crecer una empresa en el extranjero la cadena de abastecimiento debe ser eficaz; la compañía tendrá que conocer la cultura de los nuevos proveedores, recomiendan dos académicos.
jue 02 junio 2011 06:00 AM
Si vas a llevar tu empresa a otro país es importante considerar cinco aspectos para evitar una situación de riesgo: distancia, comunicación, cultura, urgencia y propiedad intelectual. (Foto: Photos to go)
cadena de riesgos (Foto: Photos to go)

Cuando se lleva a una empresa a otro país se debe tener cuidado con la forma en que se gestionan los proveedores, de lo contrario la compañía podría exponerse a una situación de riesgo que la conduciría a tener pérdidas, de acuerdo con Jason Bonin y Barry Cross de la Richard Ivey School of Business.

Los proveedores cumplen un papel crucial en la empresa puesto que proveen las materias primas y permiten que se dé el correcto flujo en la cadena de abastecimientos, de acerdo con Bonin y Cross, autores del artículo "Cadena de riesgos", publicado por la revista ExpansiónCEO, en su edición mayo-junio de 2011.

Para ambos académicos una buena cadena de abastecimientos es importante porque es una red de empresas que cooperan para transformar ideas en productos o servicios.

Si las compañías que conforman la cadena no marchan de forma alineada, es posible que la empresa no logre dar una respuesta eficaz a los cambios en la oferta y la demanda, ni logre adaptarse a los cambios estructurales del mercado.

En el momento en que se tiene un proveedor en el extranjero, fuera del entorno habitual, el primer riesgo que debe tomarse en cuenta es la posible existencia de una ‘brecha cultural': idioma, distancia, husos horarios, etcétera.

Esta 'brecha' podría terminar en una crisis de abastecimiento caracterizada por problemas en la calidad y demoras en la producción, entre otras consecuencias.

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Por eso al llegar a un nuevo país, Bonin y Cross recomiendan tomar en cuenta factores externos a la empresa como la comunicación, la distancia, la cultura, la urgencia y la propiedad intelectual.

Además sugieren tres cambios fundamentales en el enfoque de las empresas con proveedores en el extranjero para aminorar el riesgo.

  1. Utilizar dos proveedores para abastecerse. El primer proveedor debe operar cerca de la empresa y tiene que contar con una larga trayectoria de trabajo con la firma. Tendrá a su cargo un volumen fijo de trabajo. El segundo proveedor es el más económico, pero el de mayor riesgo: el que está en el extranjero. Tendrá un contrato de abastecimiento que aumentará gradualmente mientras desarrolla las capacidades que le permitan proveer el producto de manera confiable.
  2. Dedicar tiempo para entender las dinámicas culturales y operacionales. Todos los países y las regiones del mundo hacen negocios de manera diferente, pero el desarrollo de negocios y la ejecución de proyectos de alto riesgo requieren de redes bien establecidas, de conexiones, confianza y relaciones. 
  3. La visibilidad es una táctica simple y efectiva para mitigar el riesgo. La visibilidad se refiere a contar con líderes capacitados que trabajen en ambientes multiculturales, capaces de generar interacciones y análisis apropiados en los puntos esenciales del proyecto, y destinar los recursos necesarios para apoyar el desarrollo del proveedor.

 

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