Alemania, un "silencioso" finalista que explotó en el Mundial 2014

Bien reza el dicho: la tercera es la vencida, y Alemania logró por fin instalarse en la gran fiesta del Mundial en su tercera semifinal al hilo, con una contundente victoria de 7-1 por encima de Brasil.

De la mano de Thomas Müller, Miroslav Klose, Toniale Kroos, Sami Khedira, y un doblete de Andre Schürrle, los alemanes marcaron una de las goleadas más apabullantes en la historia de la Copa del Mundo.

Pero también con este resultado Alemania amenza con destronar a Brasil como el grande de los mundiales, al superarlo como la selección con más finales mundialistas en su historia con ocho en total, aunque la verdeamarela ha ganado más con 5 frente a 3 de los teutones.

"Siempre hemos estado callados", aseguró el entranador de la Mannschaft Joachim Löw al señalar que consiguieron un triunfo con "tranquilidad". Silenciosos, así han ido avanzando los alemanes en Brasil 2014 y este martes dieron un golpe mortal a los anfitriones.

Para Löw calificó de "increíble" que los cuatro goles cayeron en menos de ocho minutos, aunque consideró que corrieron con algo de suerte "por el shock con el que entró Brasil".

"Ellos quedaron conmocionados con nuestros goles y eso hizo el partido más fácil para nosotros", indicó el estratega al finalizar el encuentro celebrado en el estadio Mineirao de Belo Horizonte.

Sin embargo, Löw llamó a sus jugadores a llegar con "humildad" al duelo final en el estadio Maracaná el próximo domingo donde recibirán al ganador de la otra llave que disputan Argentina y Holanda.

"Un poco de humildad también sería muy bueno y tenemos que tener cuidado para seguir concentrados para el domingo", apuntó el técnico de 54 años.

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— André Schürrle (@Andre_Schuerrle) julio 8, 2014

Löw llegó en 2004 al cuadro teutón como auxiliar de Jürgen Klinsmann. Tras no llegar a la final en Alemania 2006, Klinsmann decidió no renovar contrato y Löw tomó el timón, llevando a su selección a otra semifinal en Sudáfrica 2010 donde cayó ante España. 

En Brasil 2014, los alemanes arrancaron en uno de los grupos que se esperaba ser el más disputado del Mundial, con Portugal, Estados Unidos y Ghana, pero los teutones borraron completamente a todos —con excepción de los africanos con los que empataron 2-2— goleando incluso a los lusitanos con todo y Cristiano Ronaldo.

En la fase final del Mundial parecía que Alemania bajaba el ritmo con un complicado encuentro ante Argelia que terminó por sentenciar con un 2-1 en tiempo extra. Ante Francia un gol solitario de Hummels bastó para avanzar a la antesala de la final, como un equipo discreto, sin hacer mucho ruido, y sorprender a la gran favorita.

Su figura, Thomas Müller se ha colocado como el segundo goleador del torneo, con cinco tantos, uno abajo de James Rodríguez, pero con el colombiano fuera, el alemán puede sumar más goles en la final. 

Por su parte, el veterano Miroslav Klose ha hecho historia al hacer su gol 16 en su cuarto Mundial para ser el máximo anotador en la historia del torneo por encima de Ronaldo Nazario, ya retirado de las canchas.

La última vez que Alemania se coronó campeón del mundo fue en Italia 1990 donde los teutones cobraron revancha frente a Argentina, pero desde entonces ha tenido problemas para lograr su cuarta estrella. 

A lo largo de una década, la Federación Alemana de Futbol realizó un trabajo arduo desde raíz, en futbolistas jóvenes para construir un nuevo imperio germano en Europa . El futbol alemán sufría de una falta de jóvenes para reemplazar a estrellas de mayor edad. En 2009, Alemania ganó su primer Eurocopa sub-21, donde figuró Manuel Neuer, portero del Bayern Munich.

Mario Göetze, Thomas Müller, Philipp Lahm, Bastian Schweinsteiger y Toni Kroos son algunas de estas semillas que han germinado en este Mundial de Brasil 2014.