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La policía de Cleveland critica la protesta de un jugador de la NFL

Andrew Hawkins, de los Cafés de Cleveland, portó una camiseta de protesta antes de un partido este domingo
mar 16 diciembre 2014 11:44 AM
Andrew Hawkins, Browns Cleveland
Andrew Hawkins, Browns Cleveland Andrew Hawkins, Browns Cleveland

La policía de Cleveland criticó al jugador de los Cafés de Cleveland, Andrew Hawkins, por portar una camiseta que pedía justicia en el tiroteo de la policía a Tamir Rice, durante un calentamiento antes del partido de NFL de este domingo contra los Bengalíes de Cincinnati.

La camiseta del receptor de los Cafés decía “Justicia para Tamir Rice y John Crawford III” cuando salió a la cancha antes del partido.

Tamir de 12 años fue herido mortalmente en noviembre por un policía de Cleveland, mientras que la policía le disparó y asesinó a John Crawford III de 22 años, en un Walmart  en Beavercreek, Ohio, Estados Unidos, en agosto.

Jeffrey Follmer, presidente de la Asociación de Patrulleros de Policía de Cleveland, criticó la protesta en la cancha de Hawkins. “Es bastante patético cuando los atletas creen que conocen las leyes. Deben apegarse a lo que hacen mejor en la cancha”, dijo Follmer a CNN en un comunicado.

“La Policía de Cleveland protege y sirve al estadio de los Cafés”, dijo. “La organización de los Cafés nos debe una disculpa”.

Los médicos forenses dictaminaron el pasado viernes que la muerte de Tamir fue un homicidio . Las autoridades dijeron que el oficial que le disparó confundió la pistola de aire del niño con un arma de verdad.

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Tamir apuntaba una pistola de aire a las personas afuera de un centro de recreación antes de que le dispararan, según la policía. Un testigo llamó al 911 para decir que un hombre negro; “probablemente un joven”, apuntaba “una pistola” a las personas pero añadió dos veces que la pistola “probablemente” era falsa.

Dos oficiales llegaron en una patrulla. Después de dos segundos de salir del automóvil, el oficial Timothy Loehmann le disparó a Tamir, y el niño murió al día siguiente, según la policía.

La policía dijo que Loehnamm abrió fuego después de que Tamir tomara la pistola de su cintura y que se le quitara una etiqueta naranja que indica que el arma era un juguete.

Follmer describió el tiroteo de un niño de 12 años como “desafortunado”.

“Pero los hechos son, que parecía ser un hombre de 20 años. En los ojos del policía de Cleveland, su apariencia física excedía la del perfil de Andrew Hawkins”, dijo Follmer. Señaló que el jugador de los Cafés medía 1.70 metros y pesaba 77.1 kilogramos, comparados con los 1.70 metros y 88.4 kilogramos de Tamir.

El vicepresidente de comunicaciones de los Cafés de Cleveland, Peter John-Baptiste, dijo que el equipo de la NFL tenía un “gran respeto” por el trabajo de la policía de Cleveland.

"También respetamos los derechos de nuestros jugadores de proyectar su apoyo y crear conciencia por cuestiones que son importantes para ellos si se realiza en una forma responsable”, dijo.

En septiembre, un gran jurado decidió no acusar a los policías involucrados en la muerte de Crawford. Pero el procurador general de Ohio, Mike DeWine, dijo que el Departamento de Justicia de Estados Unidos revisaría el tiroteo del residente de Cincinnati.

Crawford fue disparado y asesinado por la policía en un Walmart en Beavercreek el 5 de agosto mientras llevaba un rifle de aire por la tienda. La policía respondió a la escena después de que un testigo llamara al 911 y dijera que Crawford caminaba con un rifle y “lo movía de atrás para adelante”.

Según la policía, cuando los oficiales llegaron, Crawford no cumplió con las órdenes de que bajara el arma.

Le dispararon dos veces, una en el codo y otra en el torso, dijo el fiscal, y murió poco después de ser transportado a un hospital cercano.

Las críticas de la policía a Hawkins en Cleveland se presentan después de una controversia similar que involucra a jugadores de los Carneros de San Luis por el tiroteo de Michael Brown en Ferguson, Missouri. La Asociación de Oficiales de Policía de San Luis dijo que estaba “profundamente decepcionada” después de que cinco jugadores de los Carneros levantaran las manos antes de un partido del 30 de noviembre en solidaridad con los manifestantes molestos por la muerte de Brown.

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