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Caballos que enseñan a pedir más salario

La "equi-capacitación", es una técnica desarrollada en Bélgica para “dominar” las emociones; Thierry Verwaerde, su creador, ya ha tenido 20 clientes en el primer año, desde que creó la com
dom 23 septiembre 2007 10:32 PM
Según la técnica, si puedes "domar" a un caballo, hablar con

Jonas De Cooman está intentando conseguir un aumento de sueldo. Lamentablemente para este ejecutivo de marketing belga, para lograrlo debe persuadir a un caballo castrado llamado Jumper a que se mueva.

En un escenario de capacitación corporativa similar a este, De Cooman resultó el perdedor. El caballo mostró un vago interés en el macizo de pasto que le estaban agitando en su cara, antes de seguir resoplando al suelo.

"El principal problema aquí es la incapacidad para cambiar de estrategia", explicó el entrenador Thierry Verwaerde, mientras De Cooman y dos colegas más de una firma multinacional luchaban por hacer que Jumper siguiera sus instrucciones en un prado del campo belga.

Verwaerde y su esposa Bernadette Delvaux son pioneros en una técnica de capacitación corporativa que denominan "equi-capacitación", cuya herramienta es la muy nerviosa naturaleza de los caballos.

Si la máxima dice que uno puede llevar un caballo hasta el agua, pero no puede obligarlo a beber, el método obliga a los que cursan la capacitación a probar una variedad de tácticas y estratagemas para ganarse al animal, y al hacerlo, comprender las fortalezas y debilidades de su propio lugar de trabajo.

Los caballos no tienen monturas ni herraduras. Los ejercicios son en gran medida desmontados y están diseñados para que los jinetes experimentados no tengan un mejor desempeño que los novatos.

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Quienes son capacitados a veces portan una fusta, utilizada para hacerle señales al caballo, pero no se los alienta a usarla con fuerza alguna.

"El caballo es una presa. Su instinto es huir. Tiene un sentido emocional bien desarrollado y nosotros usamos esa hipersensibilidad", dijo Verwaerde, de 50 años, un especialista en ciencias de la educación.

"También pesa 500 kilogramos", agrega. La impresionante presencia física del animal para muchos forma parte de la experiencia.

Verwaerde y la sicóloga Delvaux desarrollaron el método según las teorías de la etología, la ciencia que estudia la conducta animal que surgió en la década de 1920 en Europa.

Usando la burbuja

Si bien los caballos han sido usados con fines terapéuticos en Estados Unidos y otras partes, ellos dicen que su compañía, Equi-RH, ubicada en la pequeña ciudad de Weopin, 70 kilómetros al sur de Bruselas, es de las pocas que usan animales en el desarrollo de destrezas para el lugar de trabajo.

"Lo que ofrecemos aquí está cargado de emociones. Y cuando tienes que vértelas con el conflicto, el aspecto emocional es con frecuencia el más importante", dijo Delvaux, quien ha tenido alrededor de 20 clientes en el primer año comercial de la compañía.

Muchos de los ejecutivos vistos por la compañía muestran una falta de confianza personal que les impide expresar claramente lo que quieren que el caballo haga, dice Delvaux. Otros se enfrentan a desafíos emocionales distintos.

"Recibimos a un hombre que emanaba tanto enojo que casi hizo que el caballo enloqueciera y tuvimos que decirle que se detuviera. Pero al final, él cambió", dijo Delvaux.

Después de un par de horas, De Cooman y sus colegas se adaptan a maniobrar los caballos, mientras se los alienta a usar su "burbuja", un término que Verwaerde Y Delvaux usan para describir una presencia personal o aura que afirman que los caballos perciben.

"La palabra es profunda. Uno siente como si estuviera tocando sus raíces aquí", dijo la buscadora de talentos corporativos Sofie Van Eemeren, de 26 años.

En breves sesiones informativas después de los ejercicios, los clientes y capacitadores examinan los desempeños y las tácticas. La charla rápidamente pasa a la cultura corporativa y a los defectos del empleador.

"Parece permitirles llegar al corazón de los problemas en sus negocios", dijo Delvaux.

Ruido Zumbante

¿Pero son acaso las destrezas aprendidas con Jumper realmente transferibles al entorno humano de negocios?

De Cooman cuestiona si existe un paralelo entre persuadir a un caballo para que trote por un potrero y el desarrollo de una gran campaña de marketing, aunque finalmente reconoce que la flexibilidad en las tácticas puede ayudar en ambos casos.

Delvaux dice que muchos clientes sólo se percatan de los cambios en su perspectiva un tiempo después del entrenamiento, e incluso entonces éstos son bastante sutiles. Pero sostiene que la experiencia es más memorable que un día frente a un pizarrón aprendiendo técnicas administrativas.

"Es el placer de la experiencia junto al caballo el que más tarde te permite hacer la conexión con tu vida profesional", dijo Delvaux.

En el ejercicio de aumento de sueldo, donde no había un intercambio real de dinero, la técnica de Verwaerde fue la de acercarse a Jumper con aire resuelto desde atrás haciendo un ruido zumbante.

El animal entretenido atentamente realizó un rápido recorrido por el prado antes de regresar a acariciarle la mano con el hocico.

Si bien no aconseja la misma estrategia en la tradicional situación empleado-superior, Delvaux explicó: "Es una cuestión de seguridad personal. Cuando quieres algo, debes mostrar que realmente lo deseas", concluyó.

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