El petróleo cayó este lunes a menos de 68 dólares, debido a que una toma de ganancias recortó las ganancias impulsadas por preocupaciones sobre los suministros de gasolina en Estados Unidos.
El crudo Brent actualmente considerado como más representativo de los precios globales de petróleo que el de Estados Unidos, perdió 76 centavos o un 1.1%, a 67.65 dólares el barril.
El crudo estadounidense cayó 75 centavos de dólar, a 65.71 dólares tras operar en terreno positivo previamente en la jornada ante problemas operacionales en refinerías.
Los precios del petróleo subieron el viernes tras noticias de que el mayor exportador mundial Arabia Saudita dijo que había frustrado un complot vinculado con al-Qaeda para atacar instalaciones petroleras.
Apagones en refinerías y largos períodos de mantenimiento en Estados Unidos han apuntalado los precios en semanas recientes, mientras los inventarios de gasolina cayeron por 11 semanas consecutivas, una baja de casi un 15% desde comienzos de febrero.
Las empresas generalmente aumentan los inventarios de gasolina en esta época del año, en anticipo a un alza en la demanda del combustible.
Las preocupaciones por suministro impulsaron la gasolina reformulada estadounidense en más de ocho centavos a más de 2.50 dólares el galón durante el comercio interdiario del lunes, su mayor precio desde el 12 de mayo del 2006.
Amenaza Saudita
El crudo Brent subió más del 1% el viernes, elevando las ganancias de la semana a casi 2 dólares, después que Arabia Saudita dijo que había arrestado a militantes sauditas, que se preparaban para realizar operaciones suicidas contra instalaciones petroleras y bases militares.
"El anuncio de Arabia Saudita ha servido como recordatorio al mercado de los potenciales riesgos para los suministros petroleros", dijo David Moore, analista del Commonwealth Bank de Australia.
"Es improbable que esos riesgos se terminen pronto", agregó.
Subrayando la potencial inestabilidad regional, Irán descartó el domingo cualquier sugerencia que podría implicar la suspensión parcial de sus actividades de enriquecimiento de uranio como forma de terminar un importante punto muerto en una disputa internacional.
Analistas dijeron que la reciente declaración había minado las esperanzas de una inminente resolución, que fue planteada la semana pasada, cuando el principal negociador nuclear de Irán, Ali Larijani, dijo que Teherán y la Unión Europea estaban acercando sus puntos de vista.
Las tensiones entre Irán, el cuarto abastecedor mundial de petróleo, y países del Occidente por el programa nuclear de Teherán han estado en el contexto durante más de un año.
Desde que en enero cayó por debajo de 50 dólares, el petróleo ha rebotado fuertemente por una combinación de preocupaciones por los suministros y gran demanda de gasolina en el mayor consumidor mundial, Estados Unidos.
