Los precios del crudo a término ascendieron el lunes por los persistentes temores de que las refinerías estadounidenses no estén produciendo suficiente gasolina para satisfacer el incremento de la demanda durante la temporada de verano, la de mayor consumo en ese país.
La tendencia alcista, sin embargo, fue moderada por las noticias de que un oleoducto clave de Nigeria que había sido tomado por un grupo de manifestantes durante casi una semana, fue reabierto.
El crudo dulce ligero de bajo contenido sulfuroso para entrega en junio avanzó 34 centavos a 65.28 dólares el barril en la contratación electrónica de la Bolsa Mercantil de Nueva York al mediodía europeo.
El contrata subió 8 centavos y cerró en 64.94 dólares el viernes, después de haber ascendido 2,31 dólares la jornada anterior.
El crudo Brent del Mar del Norte para entrega en julio registró un alza de 40 centavos a 69.82 dólares el barril en el mercado internacional ICE de Londres.
En otras operaciones realizadas en la bolsa neoyorquina, los precios a futuro del aceite para calefacción avanzaron más de 2 centavos a 1.9363 dólar el galón (3.8 litros), mientras que los del gas natural se mantuvieron estables a 7.946 dólares los 1,000 pies cúbicos.
Ante la llegada de la temporada en la que más se maneja en Estados Unidos, en poco más de una semana, los operadores temen que los suministros de gasolina no satisfagan la demanda. Una serie de inconvenientes técnicos en las refinerías han contribuido con esa preocupación.
La administración de Información de Energía de Estados Unidos reportó el miércoles pasado que las reservas de gasolina, si bien se incrementaron a 195.2 millones de barriles en la semana que culminó el 12 de mayo, seguían por debajo del promedio normal para esta época del año.
Los operadores seguían también con atención la situación política de Nigeria, el mayor productor de petróleo de Africa y uno de los principales abastecedores de Estados Unidos.
