El crudo, cerca de los 130 dólares
El petróleo subía este lunes por temores a que una tormenta que se dirigía hacia el Golfo de México interrumpa la producción de crudo y gas costa afuera.
El crudo ligero estadounidense avanzaba 1.09 dólares, a 129.97 dólares el barril.
En Londres, el crudo Brent ganaba 1.20 dólares, a 131.39 dólares el barril.
El Centro Nacional de Huracanes estadounidense advirtió que la tormenta tropical Dolly, la cuarta que se forma en lo que va de la actual temporada de huracanes en el Atlántico, podría tener fuerza de huracán el martes, pero la Administración de Información de Energía informó que con su actual rumbo probablemente no afecte las principales áreas productoras de crudo, pero pudiera amenazar algunas refinerías de la costa en la semana.
Shell Oil Co comenzó a evacuar a los trabajadores de sus plataformas costa afuera como una medida de precaución, mientras que muchas otras petroleras con instalaciones en el Golfo de México dijeron que estaban siguiendo de cerca la tormenta.
"A pesar de que el impacto directo sobre la infraestructura petrolera se espera que sea limitada, existe una posibilidad de evacuaciones de precaución de las plataformas", dijo Jim Ritterbusch, presidente de Ritterbusch & Associates.
En el 2005, los huracanes Rita y Katrina atravesaron a lo largo del golfo de México, donde yace más de un cuarto de la producción petrolera estadounidense y cerca del 15% de la de gas, cerrando las plataformas aguas afuera y las refinerías costeras.
El infructuoso diálogo para poner fin a la disputa nuclear entre Irán y Occidente, también daban soporte a los precios.
Las principales potencias dieron el sábado a Irán dos semanas para que responda a las demandas de que abandone su programa nuclear o afronte sanciones más duras.
La reciente guerra de palabras entre Irán y Occidente sobre el programa nuclear de Teherán ha contribuido con las tensiones en Oriente Medio que llevaron al crudo a un récord de 147.27 dólares el barril el 11 de julio.
Pero los precios registraron una fuerte corrección la semana pasada, presionados en parte por las preocupaciones en torno a la frágil economía de Estados Unidos, el mayor consumidor mundial de energía.
