La crisis económica ayuda al PRI
La desaceleración económica ha debilitado los bolsillos de los mexicanos, pero además ha inyectado vitaminas al partido opositor PRI, que aprovechando el impacto de la crisis en la imagen del Gobierno ahora lidera las encuestas para las elecciones intermedias.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), que se mantuvo en la presidencia de México por siete décadas bajo acusaciones de corrupción hasta el 2000, colaboró en el Congreso con el partido del presidente Felipe Calderón.
Desde allí colaboró con el oficialismo que tiene mayoría relativa en el parlamento para aprobar reformas clave como la fiscal y la energética.
Pero ahora el partido opositor, favorito en sondeos hacia los comicios de julio, en los que se renovarán los diputados federales y seis gobiernos estatales, ha comenzado a criticar al Gobierno por su estrategia contra el narcotráfico y el manejo de la economía, entre otros temas.
"El PRI robaba pero también daba. No teníamos esta crisis de ahora", dijo Efrén Ramírez, un vendedor de golosinas de 63 años que evaluaba votar por el PRI después de haber votado por Calderón del Partido Acción Nacional (PAN) hace tres años.
México atraviesa por una desaceleración económica que va camino a convertirse en recesión debido al desplome de la economía de Estados Unidos, destino de más del 80.0%, de sus exportaciones.
El banco central espera que la economía mexicana se contraiga hasta un 1.8%, este año, mientras las exportaciones y producción industrial caen al ritmo de la confianza al consumidor.
"La crisis es la gran desventaja del PAN frente a estas elecciones, donde se premia o se castiga al Gobierno. Y el PRI cuenta con muchas ventajas, entre otras, su estructura territorial", opinó Irma Méndez de Hoyos, investigadora de la universidad FLACSO en México.
Bajo la presidencia del PRI a mediados de la década de 1990 México atravesó la dura crisis del "Efecto Tequila", en la que el Gobierno salió al rescate de los bancos y muchos mexicanos perdieron sus negocios y casas por no poder pagar los créditos, que alcanzaron valores estratosféricos.
Hartos de la corrupción que envolvía al PRI después de siete décadas de llevar las riendas del país, los mexicanos eligieron en el 2000 al panista Vicente Fox como presidente.
A pesar de su histórico tropiezo, que dejó al partido desorientado por un tiempo, el PRI logró mantenerse gobernando la mayoría de los estados y municipios del país y apoyó al Gobierno de Calderón.
Con astucia, el PRI volvió a resurgir de entre las cenizas mientras el Gobierno lucha contra la economía y el narcotráfico y la principal agrupación opositora, el izquierdista Partido de la Revolución Democrática, quedó debilitado por una crisis interna el año pasado derivada de la elección de su jefe.
"El PRI va a ganar las elecciones, usó su tercer lugar en el Congreso con mucha inteligencia. Y el debilitamiento del partido gobernante pudiera verse acelerado por el impacto de la crisis económica", dijo Federico Estévez, analista de la universidad ITAM.
Una encuesta de Consulta Mitofsky de febrero mostró al PRI con el 34.4%, de la intención de voto para las elecciones de julio, al PAN con un 25.5%, y al PRD con un 12.7%.
Ahora el Gobierno está tratando de destacar el combate a los narcotraficantes porque es la base de la popularidad de Calderón, según analistas.
El presidente ha enviado a decenas de miles de policías y soldados para frenar una ola de violencia relacionada con el narcotráfico que no para y que dejó el año pasado un tendal de 6,300 muertos, y sembró de violencia y temor ciudades enteras del norte del país.
Esta semana el Gobierno incluso publicó una lista de narcotraficantes sobre los que ofrecía recompensas de hasta 30 millones de pesos (poco más de dos millones de dólares).
"Yo siento que están acudiendo a este tipo de instrumentos porque no tienen forma de saber, a través de sus órganos de inteligencia, qué es lo que está pasando", dijo el presidente del Senado, el priísta Manlio Fabio Beltrones.
El propio partido de Gobierno ha disparado contra el PRI e incluso el presidente de la agrupación, Germán Martínez, acusó a un candidato a diputado del PRI de tener vínculos con el narcotráfico.
"Aunque le duela al PRI reconocerlo, ningún presidente surgido de sus filas durante las siete décadas que gobernaron el país enfrentó la lucha por garantizar la tranquilidad de las calles y la salud de los jóvenes mexicanos", dijo Martínez en una columna publicada en un diario mexicano.
