EU propone nueva agencia reguladora
El Tesoro de Estados Unidos envió el martes al Congreso una propuesta para crear una nueva agencia reguladora con poderes amplios para diseñar y hacer cumplir nuevas leyes de protección al consumidor sobre los bancos y otras entidades financieras. El cuerpo legislativo propuesto establece planes para cambios de amplio rango en las regulaciones financieras que divulgó el Gobierno del presidente Barack Obama el 17 de junio.
La Agencia de Protección Financiera al Consumidor (CFPA, por sus siglas en inglés) apunta a proteger a los estadounidenses de las prácticas abusivas ampliamente usadas durante el auge de la vivienda y el crédito, tales como los prestamos hipotecarios engañosos, la divulgación de información de los préstamos y las alzas injustas en las tasas de interés.
La propuesta del Tesoro consolidaría el poder de la protección al consumidor en una sola agencia, dando a la CFPA autoridad exclusiva en la supervisión y revisión al cumplimiento de las instituciones bancarias con los consumidores.
Estas responsabilidades actualmente se encuentran divididas entre varias agencias reguladoras bancarias, incluyendo a la Reserva Federal, que ha sido criticada por no poder imponer mayores restricciones a los prestamistas hipotecarios.
"La protección al consumidor tendrá un asiento independiente en la mesa en nuestro sistema regulador. Mediante la consolidación contable en un sólo lugar, reduciremos las brechas en la supervisión federal y la ejecución", dijo en un comunicado el secretario del Tesoro, Timothy Geithner.
La nueva agencia tendrá poderes para diseñar normas y velar por su cumplimiento, puede emitir citaciones, sostener audiencias y buscar órdenes de la corte para detener las prácticas abusivas de los bancos y entidades no bancarias, incluyendo prestamistas hipotecarios, que generalmente caen en vacíos legales en la estructura actual.
El Tesoro dijo que la agencia podría imponer nuevas normas sobre los corredores hipotecarios para eliminar los conflictos de interés y promover mejores prácticas, así como prohibir las prácticas injustas como las "primas de los diferenciales de rendimientos", pagos adicionales de los prestamistas a los corredores de préstamos para que lleven a los consumidores hacia los préstamos más caros.
