Los demócratas se rebelan contra Obama
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Los demócratas en la Cámara de Representantes de Estados Unidos desafiaron al presidente Barack Obama este jueves, rechazando un tratado tributario que alcanzó con los republicanos, y complicando los esfuerzos para extender los recortes de impuestos que expiran en tres semanas.
Los demócratas de la Cámara votaron en una reunión en el Congreso en contra de su propuesta, además de pedir cambios a las provisiones que consideran muy generosas para el 2% de los estadounidenses más ricos.
La presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, quien ha sido una aliada clave de la Casa Blanca, se unió a la rebelión en contra del plan tributario, prometiendo prevenir que la Cámara vote sobre ello.
Pero sigue habiendo un fuerte apoyo para la propuesta en el Congreso y tiempo para los legisladores para negociar un compromiso.
Obama quiere extender todos los recortes tributarios individuales por dos años, junto con una extensión de los beneficios por desempleo, promulgando un recorte de impuestos sobre las nóminas y otras medidas.
Los economistas dicen que el tratado puede impulsar la floja economía en momentos en que el Congreso no tiene más apetito para más esfuerzos de estímulos basados en gastos.
Demócratas molestos
Los demócratas de la Cámara están particularmente molestos con la extensión de impuestos para los estadounidenses más ricos y un generoso tributo estatal.
"El caucus demócrata resolvió que en la forma actual el paquete tributario no debería llegar a la Cámara para una consideración", decía una resolución aprobada por los demócratas.
Obama se comprometió con los republicanos, luego de que su partido perdiera fuertemente en las elecciones legislativas de noviembre.
"Si la idea es que este es un pacto de tómalo o déjalo, creo que el presidente se va a dar cuenta que va a haber un montón de demócratas que van a votar no", señaló el representante demócrata Anthony Weiner a la cadena ABC.
Pero los socios demócratas en el Senado estaban diseñando un lenguaje legislativo a puertas cerradas.
El líder demócrata del senado, Harry Reid, indicó que la Cámara puede sostener una votación el sábado sobre la legislación.
El plan tributario podría impulsar el crecimiento desde medio punto a un punto porcentual completo el próximo año, crear millones de empleos y reducir la demanda sobre la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) para impulsar su programa de compra de bonos, según varios analistas.
También empeoraría el déficit presupuestario en tiempos en que los votantes están bastante preocupados sobre los niveles récord de la deuda estadounidense.
El plan costaría 700,000 millones de dólares en dos años, según un asesor republicano del senado, aunque otras estimaciones han puesto el costo total en hasta 1 billón de dólares.
