Francia quiere apoyo del G8 para FMI
Los líderes del Grupo de los Ocho permanecían reunidos este jueves en Francia, en una cumbre marcada por la crisis en los países árabes pero también por el debate en torno a la elección del nuevo director gerente del Fondo Monetario Internacional. El tradicional club de las adineradas potencias industriales podría aprovechar la ocasión para reunir apoyo para la candidata francesa a la jefatura del FMI, pese al descontento de las economías emergentes, que quieren un mayor poder dentro del FMI.
China elevó la posibilidad de más enfrentamientos por la posibilidad de que la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, reemplace a Dominique Strauss-Kahn, quien renunció a su cargo como director gerente del FMI al ser acusado de intento de violación.
Beijing exhortó a una "consulta democrática" sobre el puesto del FMI , haciendo dudar del anuncio francés de que Lagarde contaba con el apoyo de China. Un funcionario francés dijo que Lagarde viajará pronto a Beijing.
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, dijo en París que Estados Unidos no tenía una postura oficial respecto a Lagard e, aunque funcionarios estadounidenses han indicado que Washington la apoyaría.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, fue el anfitrión del almuerzo inaugural de la cumbre de 24 horas en la ciudad norteña de Deauville, donde se realizó la reunión en medio de una fuerte seguridad.
Un centenar de manifestantes de izquierda protestó contra el encuentro en el puerto de Le Havre, a unos 40 kilómetros de distancia.
Los encuentros bilaterales de los líderes del G8 partieron antes del almuerzo. Sarkozy se reunió con el presidente ruso, Dmitry Medvedev, quien a su vez mantuvo un encuentro con el mandatario estadounidense, Barack Obama, antes del inicio formal de la cumbre.
Tanto Obama como Medvedev hablaron sobre la necesidad de acelerar el proceso de ingreso de Rusia a la Organización Mundial del Comercio.
El G8 está integrado por Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Japón y Rusia.
Economía global
Respecto a la economía global, probablemente se discuta el futuro liderazgo del FMI y los esfuerzos de la Unión Europea para lidiar con las deudas soberanas que han llevado a varios países que utilizan la divisa única a la crisis.
Los europeos, aparentemente con un apoyo tácito de Estados Unidos, han insistido en mantener la tradición de que el director gerente del FMI provenga de Europa.
El rol del financista global en ayudar a rescatar a Grecia y otros estados endeudados de la UE ha sido citado por los líderes europeos como un factor para mantener el cargo en el continente.
No obstante, las economías BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- condenan el proceso para elegir un sucesor y exigen una mayor influencia.
Revuelta árabe
En la agenda formal del encuentro hay planes para entregar ayuda a Túnez y Egipto, dos de los países afectados por las revueltas del mundo árabe.
No obstante, la guerra de tres meses en Libia y la explosión de violencia en Yemen podrían tomar un rol mayor en las discusiones de la cumbre.
Un diplomático europeo dijo que los líderes podrían acordar buscar acciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas respecto a Yemen, donde la negativa del veterano presidente Ali Abdullah Saleh a dejar el cargo ante las protestas masivas y demandas de sus aliados regionales ha sido seguida de enfrentamientos que podrían convertirse en una guerra civil.
Los líderes instaron a Saleh a dejar su cargo.
El grupo condenará además las represiones del presidente sirio, Bashar al-Assad, sobre los manifestantes, indicaron funcionarios.
El primer ministro japonés, Naoto Kan, pondrá al tanto al G8 de la respuesta de Tokio a la crisis nuclear en Fukushima, luego del tsunami de marzo, dentro de una discusión para mejorar la seguridad de las plantas de energía nuclear.
