La recesión amenaza a Italia y GB
La producción industrial en Italia y Gran Bretaña mostraron fuertes signos de que sus economías se encaminan a una recesión en los próximos meses.
La producción industrial italiana cayó dos veces más rápido de lo esperado en octubre, bajando 0.9% mensual tras una caída histórica del 4.6% el mes previo, en un mal presagio para el desempeño de la economía en el último tramo del año.
Sobre una base ajustada por los días laborales, la producción de octubre cayó 4.2%, su baja más profunda desde diciembre del 2009, según datos oficiales publicados el miércoles.
"Es más débil de lo que esperábamos y confirma nuestra idea de que la producción y el Producto Interno Bruto caerán en el cuarto trimestre", indicó la analista de Unicredit Chiara Corsa.
"Esperamos una caída del 0.6% en el PIB del cuarto trimestre", agregó.
La producción industrial británica cayó en octubre a su mayor ritmo en seis meses, según datos oficiales difundidos el miércoles, lo que refuerza las preocupaciones de que la economía de ese país podría estar cayendo en recesión.
La Oficina de Estadísticas Nacionales dijo que la producción industrial cayó 0.7% en octubre, más del doble de la previsión de descenso hecha por analistas, y una cifra que representa la mayor caída desde abril.
La medida de la producción manufacturera también cayó 0.7% en octubre, en su mayor baja desde abril. En el año, la producción fabril ha crecido solo 0.3%, el menor incremento desde enero del 2010.
"Es un comienzo sombrío para el cuarto trimestre. Tiende a confirmar nuestra opinión de que el Reino Unido va a recaer y volverá a entrar en recesión", dijo Philip Shaw, economista de Investec. "Estas cifras parecen sugerir que esto podría ser más temprano que tarde", agregó.
La austeridad ya pega a Monti
El respaldo público al nuevo primero ministro italiano Mario Monti ha caído desde que dio a conocer un estricto paquete de austeridad, pero continúa por sobre el 60%, mostró un sondeo este miércoles.
La encuesta de la organización IPSO mostró que la aprobación general a Monti cayó a un 64 por ciento, desde 73%, a fines del mes pasado antes de que se conocieran los detalles del paquete, que afecta a las pensiones y eleva los impuestos sobre las propiedades.
El estudio es divulgado en momentos en que Monti, un ex comisario europeo que formó un Gobierno de tecnócratas el 17 de noviembre, enfrenta una creciente oposición a medidas de austeridad por 30,000 millones de euros (40,300 millones de dólares).
Monti dijo en una entrevista por televisión el martes pasado en la noche que el paquete era vital para evitar el riesgo de que Italia se vuelva insolvente y que no sea capaz de pagar salarios del sector público o pensiones.
Tras considerar sus respuestas, las principales confederaciones de sindicatos italianos anunciaron el miércoles que el 12 de diciembre realizarán una huelga nacional de tres horas contra las medidas.
Monti afirmó que confía en que los italianos verán que los sacrificios son necesarios y que las medidas son justas.
"Estoy seguro que habrá protestas e incluso puedo considerarlas justificadas, pero estoy seguro que los ciudadanos entenderán", sostuvo.
El sondeo, realizado a pedido del periódico Corriere della Sera, mostró que un 66 por ciento de los italianos aprueba las medidas en general, pero un desglose de los datos indicó que se encuentran divididos respecto a si han sido distribuidas en forma justa.
Mientras que 93% de los consultados en el sondeo dijeron que están de acuerdo con tributos que afectarán a los ricos, como nuevos impuestos sobre yates, autos de lujo y aviones privados, sólo 35% estuvo de acuerdo con planes para reinstaurar un impuesto sobre residencias primarias.
Sólo 39% de los entrevistados estuvo de acuerdo con cambios al sistema previsional.
A partir del 2012, las pensiones se calcularán sólo sobre la base de contribuciones pagadas al sistema en vez de los salarios al término de la carrera.
La edad mínima para la jubilación se elevó a 62 años desde 60 años para las mujeres, y a 66 años desde 65 años para los hombres.
Uno de los pasos más controvertidos es la eliminación del ajuste anual de inflación para aquellos con pensiones mensuales de más de 936 euros.
