Commerzbank lucha por recapitalizarse
El banco alemán Commerzbank planea retener ganancias y recortar sus activos de riesgo para enfrentar una necesidad de 5,300 millones de euros de capital, en lugar de pedir ayuda al Gobierno, pese a que analistas advierten de que puede necesitar más apoyo estatal si la economía se deteriora. El segundo mayor prestamista alemán dijo este jueves que ya ha hecho provisiones por 3,000 millones de euros para juntar el capital que necesita conseguir para junio, de manera de fortalecer su balance.
El presidente ejecutivo, Martin Blessing, dijo que el banco planeaba además reducir su necesidad de capital estructural, o Tier 1, en unos 3,300 millones de euros más para cumplir con las exigencias de los reguladores. Las acciones del banco subían por expectativas de que no tenga que pedir ayuda estatal.
Los analistas habían temido que Commerzbank tuviese que recurrir al Gobierno si no encontraba formas de generar capital.
"Si el presidente ejecutivo Martin Blessing puede arreglarse sin un rescate estatal es algo que no tendremos claro hasta junio", dijo Dirk Becker, analista de Kepler Equities.
Un asunto clave es si Commerzbank puede mantener los mismos niveles de rentabilidad del 2011 en momentos en que el temor a una recesión en la eurozona crece por la crisis de deuda gubernamental del bloque.
Si eso no ocurre, no podrá contar con las ganancias para incrementar su capital.
"Le deseo buena suerte ahora que estamos entrando en recesión", dijo Becker.
Commerzbank dijo que conseguirá los objetivos de capital siempre que el ambiente macroeconómico no se deteriore más y la crisis de deuda soberana no se agrave.
Las acciones del banco subían 9.9% a 1.55 euros.
La Autoridad Bancaria Europea, un regulador, ha exigido que el banco consiga 5,300 millones de euros de capital estructural adicional para medidados del 2012, como parte de su plan para ayudar a los bancos a enfrentar mejor la crisis de la eurozona.
Los planes de Commerzbank incluyen recortar sus activos de riesgo otros 17,000 millones de euros, retener ganancias y no tomar más negocios fuera de Alemania y Polonia.
