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México ‘roba’ inversores a Brasil

La estabilidad económica del país seduce a los inversionistas a traer su dinero a la Bolsa mexicana; después de ser el mercado ‘mimado’ por años, Brasil empieza a ser afectado por su desaceleración.
sáb 26 mayo 2012 04:56 PM
El dinero extranjero como proporción de la capitalización total en la Bolsa mexicana es del 32%. (Foto: Archivo)
bolsa mexico (Foto: Archivo)

México está robándole inversiones a la Bolsa de Brasil por la estabilidad que le da su estrecha sociedad con Estados Unidos, mientras el gigante sudamericano pierde vapor y se convierte en una apuesta más riesgosa en tiempos turbulentos. Aunque la Bolsa de Sao Paulo tiene tres veces la capitalización de la de México, los flujos hacia el mercado mexicano vienen subiendo este año a paso lento, casi borrando la abismal brecha que los separaba, según datos de EPFR Global.

Después de haber sido la 'niña mimada' de los mercados emergentes por años, comienza a pesar sobre Brasil un coctel de factores que van desde la desaceleración de su economía y los controles a los flujos financieros, hasta sus fuertes vínculos comerciales con la azotada Europa y la debilitada China.

Cuando la semana pasada los inversores se desprendieron espantados de acciones de mercados emergentes por la crisis griega, la Bolsa de Brasil sufrió una salida de dinero de fondos de inversión 10 veces mayor a la de la mexicana, mostró EPFR.

Mientras retoman fuerza los temores por la crisis en la zona euro y su eventual impacto global, México -que había quedado a la sombra de Brasil- empezó a brillar por su calma pero constante expansión económica, las menores regulaciones de sus mercados y una mayor resistencia a los vaivenes externos.

La gradual mejoría en la economía de su principal socio comercial, Estados Unidos, también es un factor clave. Y la violenta guerra contra el narcotráfico, que ha dejado alrededor de 55,000 muertos desde el 2006, aún no pesa en las decisiones de los inversores ni se refleja en las variables económicas.

El dinero extranjero como proporción de la capitalización total en la Bolsa mexicana es del 32%. En Brasil no existen datos comparables con los de México, pero las compras y ventas de acciones de inversionistas externos representan este año un 40% del total.

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Los flujos extranjeros al mercado accionario mexicano fueron en el primer trimestre los mayores desde el tercer trimestre del 2009.

"Hemos estado poniendo más dinero a trabajar en México a expensas de Brasil", dijo Ed Kuczma, analista para los fondos de acciones de mercados emergentes de Van Eck, que tienen unos 275 millones de dólares en activos.

"Los inversores están empezando a ver un ambiente macroeconómico más favorable en México y uno más desafiante para Brasil", sostuvo.

Brasil, sin embargo, aún tiene un peso de alrededor del 10% en los dos fondos emergentes de Van Eck frente al 2.4% de México.

México, ¿más resistente?

Después de una impresionante expansión del 7.5% en el 2010, Brasil bajó la velocidad y creció un 2.7% el año pasado, menos de la mitad del ritmo de Perú, Colombia, Chile o incluso Ecuador.

Otra señal negativa es que la actividad económica se contrajo durante tres meses seguidos este año. Se espera que el país sudamericano crezca un 3.3% en el 2012 y el Gobierno está anunciando incentivos al consumo.

El destino económico de Brasil se encuentra más ligado a los volátiles precios de las materias primas que produce y a la demanda de China, que se está desacelerando.

Para empeorar las perspectivas, Europa es su principal mercado de exportación y mientras Italia y España han caído en recesión, Francia comienza a estancarse.

México se expandiría entre un 3.25% y un 4.25%, según pronósticos del Banco de México, gracias a una mayor demanda de manufacturas de Estados Unidos, mientras crecen las apuestas a que Washington podría resistir una eventual crisis en Europa o incluso quedar totalmente deslindado.

Capital Economics publicó la semana pasada un informe en el que aseguró que la economía mexicana está "bien parada para soportar los choques externos".

México tiene finanzas públicas sanas y reservas internacionales rondando niveles récord que le ayudarían a amortiguar un eventual impacto del exterior.

"Creo que hay una sensación generalizada de que México podría ser más lento y sostenido, pero más estable al mismo tiempo, mientras Brasil ha estado subido a una montaña rusa", dijo a Reuters Neil Shearing, de Capital Economics en Londres.

"Han comenzado a surgir dificultades reales en su modelo de crecimiento", agregó.

A pesar de todo, los inversores en deuda siguen fluyendo hacia Brasil, según datos de EPFR. Su tasa de interés de referencia del 9% es una de las más altas del mundo y en términos reales rondan el 4% frente al 1% de las mexicanas.

Sin embargo, el plan del Gobierno brasileño es reducir ese enorme diferencial. Este mes anunció una revisión de las reglas de las cuentas de ahorro nacionales para permitir que las tasas de interés caigan en los próximos meses.

Los inversores que apuestan a las acciones latinoamericanas también están viendo oportunidades en mercados más pequeños que tienen una perspectiva de crecimiento económico más acelerado, como Colombia y Perú.

"Si ves los números recientemente verás que México está empezando a atraer un montón de dinero que había estado ubicado en Latinoamérica", dijo a Reuters Alex Ibrahim, jefe de Listados para América Latina, Bermuda y el Caribe de NYSE Euronext, grupo que maneja Bolsas como la de Nueva York y representa un tercio del volumen global negociado en acciones.

"El dinero en realidad está saliendo de Brasil y yendo a México, Colombia, Chile, Perú, otros mercados de la región", agregó.

"El enano más alto"

La desaceleración económica no es la única fuente de incertidumbre para los inversores en Brasil. Otras recientes medidas del Gobierno de Dilma Rousseff también pesan en sus decisiones.

El Gobierno brasileño ha venido aumentando y ampliando un impuesto a las transacciones financieras de extranjeros desde el año pasado para frenar el ímpetu del real, que estaba restando competitividad a su industria.

"Lograron su deseo con la depreciación del real hacia la marca de 2 por dólar, esa fue una noticia que atrajo la atención de un montón de inversores y probablemente llevó a parte de la salida de capitales que vimos", dijo Kuczma, de Van Eck.

Los años de euforia con Brasil llevaron a los precios de las acciones por las nubes, y según muchos inversionistas subieron más allá de lo justificable por los fundamentos económicos.

"Es muy difícil encontrar ideas de inversión (en Brasil) que no sean muy caras", dijo Fred Searby, estratega de corporativos para Latinoamérica en Deutsche Bank.

"Hasta cierto punto los problemas que tiene Brasil han forzado a los inversores a mercados más pequeños, México en particular y Colombia", comentó.

Sin embargo, en México los operadores locales se quejan de que las valuaciones de las empresas son muy altas comparadas con sus pares de la región.

Las acciones de la telefónica mexicana América Móvil cotizan a un radio de precio-utilidad (PE) de 13.85, más cara que las de Telefónica de Brasil con 11.75, según datos de Thomson Reuters.

En el sector de banca, los papeles del mexicano Grupo Banorte cotizan a un PE de 14.18 mientras que los de Itaú Unibanco en Sao Paulo lo hacen a un 9.46.

Y en el sector construcción las empresas mexicanas también tienen mayores valuaciones.

A eso se suma la desventaja de que el mercado accionario mexicano es poco líquido, tiene menos volumen y variedad para invertir porque pocos sectores industriales cotizan. Aún así, le lleva varios cuerpos de ventaja al resto de mercados más pequeños latinoamericanos.

Algunos inversores creen que son precios que hay que pagar por una perspectiva de mayor estabilidad macroeconómica.

"Hay tanto dinero dando vuelta, ¿dónde lo vas a poner?", dijo un estratega de un fondo importante que pidió omitir su nombre. "Es la competencia del enano más alto, todos son chicos (...) pero tienes que escoger a uno. ¿Qué vas a elegir? Eliges al más alto", sostuvo.

Sin trabas

Las autoridades de la Bolsa mexicana aseguran que esas desventajas de su mercado se compensan con un marco regulatorio más amigable para los inversores, muy similar al de Estados Unidos y Europa.

A diferencia de Brasil, en la Bolsa de México no es necesario que los clientes finales estén registrados ante la autoridad de depósitos y pueden operar sin mayores trámites con intermediarios. Tampoco pagan impuestos a ganancias de capital.

"Hace que el inversionista extranjero se sienta cómodo y que sea una barrera muy importante menos que tiene que superar para operar valores en México. Concretamente contra Brasil es mucho más fácil", dijo a Reuters Jorge Alegría, director del Mercado de Derivados de la Bolsa Mexicana de Valores.

En Brasil, las empresas mineras y petroleras son vulnerables a una reversión en los precios de las materias primas y sus constructoras, empresas financieras y bancos podrían sufrir si la expansión del crédito termina siendo excesiva.

Del otro lado de la balanza, los gigantes globales mexicanos como América Móvil de Carlos Slim, la panificadora Grupo Bimbo o la cementera Cemex podrían mostrar un crecimiento mayor al esperado.

El principal índice accionario de Brasil, el Bovespa, se desplomó este mes un 11.6% y tocó su peor nivel en seis meses. En lo que va del año registra una caída del 3.76%, aún menor a la pérdida de más del 8% del índice de acciones latinoamericanas MSCI.

Durante las primeras tres semanas de mayo, hubo salida netas de fondos extranjeros de la Bolsa brasileña por 2,543 millones de reales (1,233 millones de dólares), según cifras del Bovespa. Pero el balance en lo que va del año todavía es positivo con entradas netas por 1,300 millones de dólares.

México también sufrió un retroceso en su índice líder, el IPC, de 5.2% este mes. Pero a diferencia de Brasil, desde el inicio del año acumula una ganancia de casi el 1%.

Y los flujos extranjeros hacia la Bolsa mexicana suman casi 2,000 millones de dólares en lo que va del 2012, según el Banco Central.

"Finalmente lo que estás tú como inversionista pagando es una expectativa de crecimiento mayor", dijo Alegría, de la Bolsa Mexicana de Valores. "Yo creo que eso en México hoy en día (...) lo tienes".

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