México abre billetera a entidad mundial
El presidente Felipe Calderón Hinojosa envió a la Comisión Permanente un decreto para firmar, en nombre de México, los Convenios Constitutivos sobre el Fondo Monetario Internacional y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento.
El objetivo es que el país aporte, si así lo avala el Congreso, 2,535 millones 868,335 dólares al aumento de capital del banco, del cual forma parte México desde 1945, y que pretende impulsar el crecimiento económico y mejorar la calidad de vida de las naciones en desarrollo.
La participación de México como accionista en el banco está conformada por 1,153 acciones del capital ordinario pagado y 17, 651 acciones del capital ordinario exigible, con 18,804 acciones suscritas del capital ordinario que equivalen a 1.18% del poder de voto, añadió.
El Ejecutivo federal precisó que al 31 de mayo de 2011, el banco otorgó financiamientos por una cartera total vigente de 5,304 millones de dólares, y su actividad crediticia anual creció sustancialmente con préstamos aprobados por 4,966 millones de dólares en promedio en 2009 y 2010.
Detalló que el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, organismo perteneciente al Banco Mundial, ha dado recursos por 548,000 millones de dólares estadunidenses, y en el caso de México ha aprobado operaciones por 51,400 millones de dólares y donativos por 350.3 millones.
Ello convierte a México en el mayor receptor de desembolsos y préstamos de dicho banco, que se han canalizado a áreas estratégicas para el combate a la pobreza, el apoyo a la educación y la salud, así como a los sectores de energía, agropecuario y forestal, entre otros.
Sin embargo Calderón Hinojosa afirmó que a partir de 2009, ante la peor crisis financiera y desaceleración económica mundial, el grupo del Banco Mundial otorgó casi 90,000 millones de dólares de apoyo, lo que lo dejó con recursos limitados.
Por ello los 186 países con participación accionaria en el Grupo Banco Mundial avalaron en abril de 2010 un aumento de capital en más de 86,000 millones de dólares, así como dar más poder de voto a países en desarrollo y la introducción de cambios administrativos y gerenciales, informó.
En ese marco, el presidente informó que la aportación de México sería de 2,535 millones 868,335 dólares, que equivalen a 2.93% del total del aumento de recursos del banco, con lo cual el poder de voto del país se elevaría de 1.18% a 1.68%.
El mandatario federal recordó que no es la primera vez que México aumentaría sus aportaciones al banco, pues con el aval del Congreso ya lo ha hecho en 1959, 1965, 1977, 1983, 1986 y 1989.
El decreto del Ejecutivo federal que recibió este miércoles la Comisión Permanente fue turnado por el pleno a la Tercera Comisión para su análisis y dictaminación.
