Hollande, cerca de acuerdos con Merkel
La victoria del presidente francés Francois Hollande, en la primera ronda de las elecciones parlamentarias lo dejaron encaminado hacia una mayoría sólida que podría facilitarle alcanzar acuerdos con Alemania sobre la crisis de la zona euro. Si las proyecciones basadas en la votación del domingo se cumplen en la segunda vuelta del 17 de junio, la izquierda no sólo controlaría la presidencia y el Parlamento por primera vez en 20 años, sino que también quedaría liberada de cualquier necesidad de depender de la izquierda más dura y escéptica del euro.
Eso le daría a Hollande el espacio político necesario para empezar a cumplir la demanda de Alemania de una unión fiscal europea a largo plazo.
A cambio, Francia quiere un compromiso para focalizarse ahora en el crecimiento después de que las duras medidas de austeridad requeridas por Berlín estancaron la economía europea, generando conmoción en todo el mundo.
La oficina de Hollande ha restado importancia a las sugerencias de que podría ceder terreno sobre soberanía fiscal a la canciller alemana, Angela Merkel, una idea tan impopular en Francia que podría hacerle perder los votos de su partido en la segunda ronda electoral.
Pero la radio francesa Inter dijo que le escribiría a sus colegas europeos esta semana antes de una cumbre del 28 y 29 de junio ofreciendo respaldar el impulso de Merkel a una unión fiscal si ella acordaba un pacto de crecimiento.
También podría llamar a una emisión conjunta de bonos que aliviaría los costos de los préstamos para las naciones del euro endeudadas. La oficina de Hollande no confirmó el reporte y personas cercanas al mandatario se mostraron escépticas.
"No pienso que una victoria en la elección parlamentaria permita a Francois Hollande adoptar una posición federalista fuerte. Eso no va a resolver los problemas actuales", dijo el economista Elie Cohen, un asesor ocasional del presidente.
Agregó que París y Berlín aún necesitaban resolver sus diferencias entre el foco alemán en la integración y la preocupación más inmediata de Francia sobre ayudar a países afectados por la recesión.
"Hay un conflicto a corto y largo plazo entre Francia y Alemania que no puede ser resuelto fácilmente", sostuvo.
Sin embargo, una fuerte mayoría parlamentaria le daría a Hollande una posición negociadora más flexible. Cualquier dependencia de los izquierdistas duros podría elevar el riesgo de que éstos demanden un referendo sobre una unión fiscal mayor.
Y cuando controló por última vez el Parlamento y la presidencia, el Partido Socialista fue generalmente más entusiasta acerca de una integración europea.
La votación del domingo dejó al bloque del Partido Socialista de Hollande con muchas posibilidades de asegurar las 289 bancas necesarias para tener una mayoría en la Asamblea Nacional de 577 escaños y casi seguro lo logrará con el apoyo de sus socios del Partido Verde, dijeron encuestadoras.
La segunda vuelta se celebrará el domingo próximo entre los principales partidos en los distritos electorales donde ningún candidato obtuvo el 50 por ciento.
Hollande necesita una clara mayoría para aprobar ajustes del presupuesto el mes próximo, que posiblemente incluirán el congelamiento del gasto. También busca elevar impuestos a los ricos.
