Huelga en Noruega impulsa al crudo
El crudo subió este lunes casi 2% y los futuros del Brent volvieron a negociarse por encima de los 100 dólares el barril, debido a una huelga en Noruega y a una inminente paralización patronal de las actividades petroleras que amenazaban con cortar el bombeo del país. En Nueva York, el petróleo subió 1.54 dólares, 1.82%, a 85.99 dólares por barril, con operaciones entre 84 y 86.48 dólares.
El contrato Brent saltó 2.17 dólares, a 100.23 dólares por barril, tras haber tocado los 101.06 dólares.
El avance de los precios fue también impulsado por las señales de que China podría flexibilizar aún más su política monetaria para enfrentar una desaceleración del crecimiento económico.
Las negociaciones entre los trabajadores petroleros noruegos y sus empleadores sobre salarios y pensiones fracasaron por tercera vez el domingo y el país se encontraba a sólo horas de su primera suspensión de la extracción de crudo en 25 años. La huelga en Noruega ya está en su tercera semana, afecta los envíos y recortó en 13% el bombeo del país, el mayor productor de Europa Occidental. El Gobierno puede forzar una finalización de la protesta, pero un portavoz del Ministerio de Trabajo dijo el domingo que no había planes de hacerlo.
Statoil, la mayor operadora noruega costa afuera, dijo que la empresa se estaba preparando para iniciar el cierre de su producción a medianoche (22:00 GMT).
"Los futuros de crudo subieron a nuevos máximos de sesión por temores a una posible paralización de la producción de Noruega y también están bajo presión por un debilitamiento del dólar", dijo Addison Armstrong, director senior de Tradition Energy.
Una pobre lectura de la inflación china junto con un derrumbe de los pedidos de maquinaria en Japón presionaban a las acciones y limitaban la escalada del petróleo, aunque la posibilidad de medidas de estímulo de Pekín para impulsar su economía era positiva para el crudo.
La inflación anual al consumidor de China fue de 2.2% en junio pasado, frente al 3.0% de mayo, mostraron datos oficiales, dando a Pekín más espacio para flexibilizar su política monetaria.
El mercado está a la expectativa del dato de producto interno bruto del gigante asiático que se conocerá durante esta semana, el cual se espera que muestre la expansión económica más débil en tres años.
Una desaceleración en China y Estados Unidos y la profundización de la crisis de deuda de la zona euro presionaron al Brent, que cayó 20% en el segundo trimestre, su mayor pérdida de tres meses desde la crisis financiera del 2008.
