Caminito a la escuela, ¿o a la quiebra?

La deuda relacionada con los préstamos privados a estudiantes en Estados Unidos se acerca a 1 billón de dólares y amenaza con convertirse en otro nuevo dolor de cabeza para la alicaída economía estadounidense.

Esta cifra supera ya el total de deuda de tarjetas de crédito del vecino país del norte y es cercana al Producto Interno Bruto (PIB) de México (de alrededor de 1.5 billones de dólares), dice el director ejecutivo de Análisis y Estrategia Económica del Grupo Financiero BX+, Carlos Ponce.

"Varios especialistas consideran que estamos en presencia de la conformación de otra peligrosa ‘burbuja', término que se utiliza en los mercados financieros desde hace muchos años para describir una tendencia peligrosa que amenaza la salud de una determinada industria o economía si estalla".

Esta situación se suma a la crisis de deuda en Europa, la cercanía de las elecciones presidenciales en EU y al llamado precipicio fiscal estadounidense ("Fiscal Cliff"), que entraría en vigor el 1 de enero de 2013 con alzas en impuestos y recortes de gastos por 7 billones de dólares, si el Congreso de ese país no logra ponerse de acuerdo para reducir la deuda.

Para EU este problema se complica día a día, y no solo por la acumulación de los adeudos e intereses, sino por la presión que representa también para padres y abuelos en una coyuntura en la que el desempleo de EU sigue siendo alto y las condiciones particulares de estos créditos en cuanto a nivel de tasa y protecciones no son mejores a los préstamos del gobierno (federales), indica Ponce.

Los estadounidenses han acumulado 150,000 millones de dólares en deuda privada de préstamos estudiantiles, con muchos graduados debiendo más de lo que pueden permitirse, según un nuevo informe de la Oficina de Protección Financiera al Consumidor.

Si bien estos préstamos representan una pequeña porción del total de deuda pendiente de pago de préstamos estudiantiles en EU (que alcanzó 1 billón de dólares en 2011), la creciente cifra genera preocupación pues está causando ya grandes problemas financieros para los prestatarios.

El directivo de BX+ destaca que los préstamos privados para estudiantes crecieron de manera importante antes de la crisis financiera de 2008 y, en su mayoría, se otorgaron con un menor número de cláusulas de protección y mayores tasas de interés que los préstamos federales.

"Demasiados estudiantes solicitaron (y recibieron) préstamos que no podían pagar y, a veces por más dinero del que necesitaban", menciona el director de la Oficina de Protección Financiera al Consumidor, Richard Cordray.

Los préstamos o créditos incobrables privados actualmente suman más de 8,100 millones de dólares, que representan 850,000 préstamos individuales, según el informe.

Cuando la crisis financiera golpeó, los prestamistas comenzaron a endurecer y a ser más cuidadosos en sus estándares crediticios. Ahora, explica Ponce, están haciendo un mejor trabajo de prestar cantidades más apropiadas de dinero a los estudiantes, trabajando más estrechamente con las escuelas para determinar las necesidades de un prestatario, y pidiendo avales.

Sin embargo, esto no ayuda a los estudiantes que tomaron préstamos antes de 2008. Los préstamos privados para estudiantes solían ser "condonados" en situaciones de quiebra de bancos como cualquier otra deuda de los consumidores, pero luego de un cambio de reglas en 2005 en el código de bancarrota, los préstamos privados para estudiantes ya no puede ser dados de baja.

Por otra parte, aunque las tasas de gobierno o federales son fijas, las tasas de los préstamos privados generalmente no lo son y a menudo son también más altas. Cuando algunos prestamistas privados anuncian que las tasas de interés son competitivas a los préstamos gubernamentales, se refieren a las que sólo están disponibles para los prestatarios con historial de crédito excelente o que tienen avales con un crédito excelente.

Los números

El Banco de la Reserva Federal de Nueva York publicó recientemente un estudio sobre la deuda de préstamos estudiantiles realizada por los investigadores Meta Brown, Haughwout Andrew, Lee Donghoon, y Wilbert van der Klaauw. En ella, comenta Ponce, alertó el problema al destacar los siguientes resultados:

• De 241 millones de personas en EU que tienen un informe de crédito, aproximadamente 15.4% (37 millones), detentan algún adeudo pendiente de pago de préstamos estudiantiles.
• El promedio de saldo pendiente de este tipo de préstamos por estudiante es de 23,300 dólares. Alrededor de una cuarta parte de los acreedores deben más de 28,000 dólares; cerca del 10% deben más de 54,000 dólares. La proporción de estudiantes acreedores que deben más de 100,000 dólares es de 3.1% y de ellos 0.45% (167,000), deben más de 200,000 dólares.
• Los estudiantes acreedores de edades entre 30 y 39 años tienen el más alto promedio de saldos pendientes de préstamos estudiantiles (28,500 dólares), seguido por los de entre 40 y 49, cuyo promedio de saldo pendiente es de 26,000 dólares.
• Alrededor de 27% de los acreedores tienen saldos vencidos, mientras que la proporción ajustada de los saldos pendientes de préstamos estudiantiles que están en mora es igual a 21%.