Moody´s exige ‘pruebas’ a México
La simple aprobación de las reformas hacendaria o energética no es suficiente para que Moody´s Investors Service eleve la calificación de la deuda soberana mexicana, actualmente en Baa1, sino que necesita que los cambios detonen un mayor crecimiento económico en el país, aseguró el director de esta agencia en México, Alberto Jones Tamayo.
"Hay muchos aspectos del crédito de México que son muy fuertes, inclusive se ven mejor que un Baa1, pero hay uno en particular que definitivamente no se ve ni siquiera como de la categoría en la que la deuda mexicana está calificada y es el tema de los ingresos gubernamentales", precisa en entrevista con CNNExpansión.
Un aspecto que pudiera hacer que la agencia revisara la calificación es que se den cambios en el régimen recaudatorio de México, de manera tal que sea más congruente con países que tienen una mejor nota crediticia.
El 8 de mayo pasado, Fitch Ratings subió la calificación del país a largo plazo en moneda extranjera, a BBB+, citando la fortaleza macroeconómica y el compromiso gubernamental de aprobar reformas estructurales.
Jones Tamayo comentó que desde hace unos años, Moody´s ajustó la nota soberana al nivel que ahora la han incrementado otras agencias, y eso fue porque las fortalezas que entonces veían para la economía no han hecho más que demostrar que la opinión que tenían fue la correcta.
Reconoció que el país vive un momento muy favorable para que se lleven a cabo los cambios que desde hace tiempo las mismas fuerzas políticas han identificado como relevantes, pero que no habían podido ponerse de acuerdo.
"Todo parece indicar que se darán las reformas fiscal y energética, cuyo contenido y alcances aún desconocemos, por lo que aún es temprano para decir cuál será el impacto, pero todo parece indicar que este mismo año podrían darse y que se van a discutir con mucha seriedad".
Puntualiza que no tienen tiempos fatales en cuanto a modificar la calificación . Llevan un seguimiento continuo e intenso de todos los cambios que se están dando, así como a la flexibilidad financiera de la que disfruta México.
"Tendremos que revisar toda la información, qué está sucediendo y en función de ello, Moody´s tomaría una decisión respecto si cambia o no la perspectiva o la calificación de México. El tema es que estén los mecanismos que aseguren que hacia adelante se podrá prever un crecimiento sostenido de los ingresos tributarios, que a su vez permitirán al Gobierno tener niveles más altos de inversión pública y atender muchas necesidades que ha tenido que moderar durante los últimos 15 o 20 años".
El director de la agencia advierte que el país necesita elevadas tasas de inversión con relación al PIB, tanto privada como pública, y el componente público -que a su vez puede detonar inversiones del sector privado- ha estado constreñido por la incapacidad en los ingresos más que por otros factores.
Hay una gran prudencia en el manejo de las finanzas públicas por parte del Gobierno mexicano, que le ha impedido tener niveles más elevados y rápidos de inversión pública, eso en sí mismo es un detonador importante de crecimiento.
"El crecimiento (económico) es muy relevante para Moody´s , como también lo es el que no se rezague el PIB per cápita, no tanto como un indicador más, pero sí es un buen aproximado con relación a muchas variables que tienen que ver con el desarrollo económico y sobre todo el nivel de riqueza de los habitantes de una nación, porque una mala distribución del ingreso a su vez no es muy favorable".
Con relación a la violencia, Jones Tamayo aseguró que es un tema que estudian para conocer si efectivamente incide en el crecimiento.
"Si bien es un problema delicado, muy grave, debemos tener evidencias más tangibles o estudios más serios de que está afectando al crecimiento de la economía mexicana, y es difícil demostrarlo", puntualizó.
