Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Reforma cambiaría dos artículos: Bernal

El plan energético del Ejecutivo modificaría los textos 27 y 28 constitucionales, según el priista; las leyes secundarias se ocuparían del pago a privados para el desarrollo en aguas profundas, dice.
sáb 10 agosto 2013 02:20 PM
Marco Antonio Bernal destacó la importancia de explicar a la población claramente lo que la reforma busca hacer. (Foto: Cuartoscuro)
marco_bernal

El Ejecutivo federal propondrá una reforma energética que incluye cambios controvertidos a la Constitución con el objetivo de atraer la inversión privada para aprovechar sus enormes reservas de petróleo y de gas de esquisto en aguas profundas, según el legislador priista Marco Antonio Bernal. El proyecto de ley, que se espera sea presentado por el presidente Enrique Peña Nieto la próxima semana, abriría el camino a la inversión del sector privado para aumentar la producción de Petróleos Mexicanos (Pemex), paraestatal que ha visto una caída por casi una década.

El presidente de la Comisión de Energía en la Cámara baja dijo que la propuesta incluirá cambios a dos artículos de la Constitución del país.

Afirmó que las denominadas leyes secundarias a considerar tras la aprobación de la reforma constitucional profundizarán un esquema de contratación más generoso que favorece los desarrollos en aguas profundas y de gas de esquisto, donde Pemex tiene muy poca experiencia.

"No necesitamos la participación privada, ni la participación de otras empresas en tierra firme y en aguas poco profundas. Pemex tiene la tecnología, la capacidad para hacerlo sola", indicó el legislador.

"Dónde no tenemos la capacidad es en las aguas profundas y en la explotación de gas de esquisto", agregó.

Pemex estima que hay hasta 29 millones de barriles de equivalente de petróleo en sus aguas territoriales en el Golfo de México, más de la mitad de los recursos potenciales de crudo del país.

Publicidad

Sin embargo, la empresa carece de la tecnología, experiencia y resultados en la explotación de pozos en aguas profundas, aun cuando en el lado estadounidense del Golfo de México la producción ha aumentado durante décadas.

México es el décimo productor mundial de crudo y también tiene las cuartas mayores reservas de gas de esquisto, estimadas en 681 billones de pies cúbicos en depósitos que pueden contener yacimientos ricos de gas natural y petróleo, según datos de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA, por su sigla en inglés).

Bernal dijo que la propuesta del Gobierno podría permitir a empresas petroleras registrar parcialmente las reservas en un campo de petróleo o gas, un detalle clave para muchos analistas del mercado; sin embargo, agregó que las especificaciones sobre este tema tendrían que quedar establecidas en leyes secundarias.

Expertos en la industria han elogiado el prospecto de una reforma constitucional, pero hasta ahora no se conoce a fondo su contenido.

"Hasta que veamos el proyecto real sabremos verdaderamente lo ambicioso que va a ser", manifestó Marcelo Mereles, socio de la consultora de energía EnergeA con sede en Ciudad de México.

Tres versiones

Mientras que el Partido Acción Nacional (PAN) ha ofrecido un proyecto de reforma que permite concesiones petroleras , líderes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) han dicho que se oponen a cambios constitucionales o a nuevos contratos de riesgo o producción compartidos.

"Estamos en contra de contratos de riesgo por una razón: están expresamente prohibidos en el artículo 27" constitucional, dijo Luis Espinoza Cházaro, diputado del PRD y secretario de la comisión de Energía de la Cámara baja.

Esfuerzos anteriores para abrir Pemex a la inversión privada se han enfrentado a una batalla cuesta arriba en México, donde el monopolio petrolero del país está profundamente integrado en la conciencia nacional.

El legislador Bernal dijo que el proyecto de ley de Peña Nieto modificaría los artículos 27 y 28 de la Constitución para permitir una mayor participación del sector privado, pero no quiso detallar el nuevo texto propuesto.

El artículo 28 define el petróleo y el gas como un sector estratégico donde el sector público ejerce un control exclusivo. El 27 prohíbe que el Gobierno otorgue concesiones al sector privado para el petróleo o el gas, lo que hace a su explotación del dominio exclusivo del Estado mexicano.

Bernal no indicó exactamente cómo las leyes secundarias se ocuparían del pago a las empresas privadas para el desarrollo de aguas profundas de México y la riqueza de esquisto, pero sí identificó tres posibilidades.

"Tienes un contrato de producción compartida, o tienes un contrato de participación en los beneficios, o tienes un contrato donde lo que produces es mío, pero yo te pago lo que has invertido. ¿Cuál será? Creo que tenemos que estar abiertos a cada una de las tres versiones", agregó.

Resaltó la extrema sensibilidad política asociada a Pemex y a la riqueza petrolera del país, por lo que habría que explicar claramente lo que la reforma busca hacer y el por qué.

Observadores creen que el no divulgar los detalles del proyecto podría tener un valor estratégico a fin de neutralizar la oposición nacionalista a una gran apertura del sector energético.

"Creo que ellos están siendo vagos a propósito para esperar hasta el último momento (...) porque la oposición va a poner el grito en el cielo", dijo Mereles de EnergeA.

Dinero Inteligente

Únete a Dinero Inteligente. El newsletter con consejos para cuidar tus finanzas.

Publicidad
Publicidad