Impuesto ‘dulce’ afectará a FEMSA y Arca
El impuesto especial a las bebidas azucaradas incluído en la propuesta de reforma hacendaria que presentó el Gobierno federal podría impactar entre 1.7% y 2.9% al EBITDA (o flujo operativo, por su siglas en inglés) consolidado de Arca-Contal, Coca-Cola FEMSA (KOF) y la cadena de tiendas de conveniencia Oxxo, según un reporte de Banamex Accival.
"El impuesto especial de un peso por litro representa un gravamen promedio estimado de 9.5% sobre las bebidas endulzadas con alta fructosa o azúcar de Arca y de 10.5% para Coca-Cola FEMSA (KOF), así como un ticket ligeramente menor y menos tráfico para Oxxo (de FEMSA)", explicó el banco en su reporte.
"Arca-Contal sufriría el impacto adicional del aumento del IVA en las ciudades fronterizas. Esperamos que Arca-Contal y KOF trasladen el aumento a los consumidores, lo cual impactaría a los volúmenes del primer semestre del 2014", anticiparon los expertos de Banamex Accival.
La iniciativa del Gobierno de Enrique Peña Nieto contempla aplicar un Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de un peso por litro a las bebidas saborizadas, concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores con cualquier tipo de azúcares.
De ser aprobado en la reforma, este gravamen le permitiría al Gobierno federal recaudar 12,455 millones de pesos (mdp) por bebidas azucaradas y 23.6 mdp por bebidas energetizantes.
La iniciativa presentada el pasado domingo argumenta que este impuesto también ayudaría a reducir los índices de obesidad y otros efectos derivados del consumo de las bebidas energetizantes como estimulantes del sistema nervioso.
El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonadas (ANPRAC), Emilio Herrera Arce, aseguró que este impuesto tendrá efectos económicos negativos altos y no combatirá eficientemente la obesidad.
El impuesto "sólo podría lograr una reducción del 1% de la ingesta calórica de los mexicanos y los efectos impositivos se trasladarían en el precio que paga el consumidor final, lo que tendría consecuencia en las familias de menores ingresos que consumen este producto. Además afectaría al empleo de personas involucradas en la cadena productiva, desde productores de caña hasta detallistas", recalcó.
"La iniciativa no ayuda a la economía ni a la industria, los refrescos ya cuentan con una carga fiscal de 16% y con esta nuevo impuesto pasaría al 35%, lo que podría impactar de manera negativa a la industria en sus volumen de producción del 10% al 15%, así como en sus ventas y nivel de empleo".
Destacó que los productos que tienen un impuesto especial son susceptibles de sufrir la competencia de la informalidad a través del contrabando, que no se sujeta a reglas de sanidad.
La Cadena Productiva de Azúcar, entre las que se encuentra la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), aseguró que la nueva carga impositiva afectaría a los 52 millones de pobres, al provocar un incremento estimado de entre 15% y hasta 20% en el precio al público de las bebidas saborizadas.
La cadena productiva de la caña de azúcar, proveedores, bebidas azucaradas, trabajadores y tienditas, genera actualmente 540,000 empleos directos y más de tres millones de indirectos, con un valor de producción de 350,000 millones de pesos, equivalente al 2.3% del PIB nacional.
"La recaudación tributaria representa 60,350 millones de pesos, es decir el 4.1% de los ingresos tributarios".
La Asociación agregó que la industria refresquera mexicana demanda el 20% del consumo interno de azúcar.
Además, los pequeños comercios, tiendas de abarrotes y misceláneas tienen como fuente principal de sus ingresos la venta de refrescos, que representan entre 25% y 30% de sus ventas totales.
