Lo que el cierre de Gobierno no se llevó

El llamado government shutdown o suspensión de servicios y actividades gubernamentales supondrá el cierre de parques nacionales y museos, y cientos de miles de empleados federales recibirán una licencia sin goce de suelo. Pero hay una serie de servicios públicos que funcionarán con normalidad.

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Muchos de estos servicios se consideran "esenciales" por lo que no verán alteradas sus operaciones, mientras que otros son financiados con recursos que no provienen del presupuesto que se debate en el Congreso.

Estas son algunas de las cosas por las que los estadounidenses no tendrán que preocuparte:

Seguridad social y Medicare. Esta es una gran preocupación para muchas personas que temen que un cierre del Gobierno detendría los cheques que ayudan a pagar sus cuentas.

Sin embargo, el financiamiento de la seguridad social es obligatorio y preceptivo, lo que significa que se autoriza de forma automática y no es parte del actual debate sobre el presupuesto. La atención médica también está asegurada, ya que Medicare entra en la misma categoría.

Los cheques del seguro social fueron enviados a tiempo durante los dos últimos cierres del Gobierno de mediados de la década los 90. Y en aquel entonces aún se enviaban por correo los cheques de papel, un trámite quizás más complicado. Hoy en día, los beneficiarios reciben los fondos a través de tarjetas de débito o depósito directo.

Sin embargo, no está claro si la administración del seguro social mantendrá el personal suficiente para procesar nuevas solicitudes sin demora.

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Cheques de desempleo. Aunque el informe mensual del Gobierno federal sobre la situación del empleo podría retrasarse por el cierre, las prestaciones por desempleo no se verán afectadas.

Al igual que la seguridad social, los cheques de desempleo deben llegar a tiempo.

Pasaportes. Los viajeros no deberán cancelar sus vacaciones. Aunque las oficinas que tramitan los pasaportes cerraron durante el cierre de los 90, permanecerán abiertas en esta ocasión, según el plan actual de suspensión de actividades del Departamento de Estado, ya que generan suficientes ingresos para costear sus operaciones.

Posible complicación: las oficinas de pasaportes ubicadas en edificios federales afectados por el cierre tal vez no abran sus puertas.

Viajes aéreos. El control del tráfico aéreo, como es lógico, cae en el campo de servicios "esenciales", por lo que los aviones seguirán despegando con normalidad.

De acuerdo al plan de cierre esbozado por el Departamento de Seguridad Nacional, la gran mayoría de los trabajadores de la Administración de Seguridad en el Transporte también tendrán que presentarse a trabajar, por lo que las líneas en las garitas de seguridad de los aeropuertos no deberían ser más largas de lo normal.

Cupones de alimentos. Pese a que algunos programas de alimentación están en riesgo, el Programa de Cupones para Alimentos continuará sus operaciones. Incluso tiene cerca de 2,000 millones de dólares en fondos de emergencia disponibles, de acuerdo con el plan de cierre del Departamento de Agricultura.

El correo. Los ciudadanos que no reciban una carta no será debido al cierre. El Servicio Postal de Estados Unidos seguirá entregando el correo como de costumbre.

Los tribunales federales. ¿Qué pasará con quienes tienen un caso judicial federal pendiente o una citación federal para servir como jurado? La justicia no se detiene para nadie.

El sistema judicial ha dicho que puede permitirse permanecer abierto durante aproximadamente 10 días hábiles en el caso de un cierre, gracias a los honorarios percibidos y a los fondos asignados con anterioridad.