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Enderézate y párate erguido con algo de ayuda electrónica

En algunos estudios se ha relacionado la postura con el estado de ánimo, la memoria, la conducta y la autoestima.
mar 18 abril 2017 04:01 PM
Postura
Postura Algunas técnicas y aplicaciones pueden servir para mejorar la postura. (Foto: OSTILL/Getty Images/iStockphoto)

Desde que tengo memoria, mi madre me ha estado machacando con mi postura.

Hizo todo lo que pudo para hacer que me enderezara cuando era joven: clases de ballet para corregir la postura, entrenador personal, fisioterapia. Pero tanto molestar y dar piruetas no sirvió para contrarrestar el embate de la laptop y el smartphone en la columna y el cuello.

¿El resultado? Mi postura es sencillamente horrenda, casi tan fea como una gárgola; sufro de dolor crónico en la espalda y el cuello.

Mis hombros jorobados y yo no somos los únicos. Según el Centro Médico de la Universidad de Maryland, Estados Unidos, entre el 60 y el 80% de la población adulta de Estados Unidos sufre de dolor en la espalda baja y es la segunda razón más común por la que la gente va al médico.

Según Lindsey Newitter, asesora de postura, la mala postura puede causar dolor grave en la espalda: "Tu cabeza pesa entre 4.5 y 5.4 kilos. Cuando miramos nuestras pantallas, nuestros ojos se cansan y luego el cuello se cansa y nos jala la cabeza hacia abajo. A eso se le llama postura con la cabeza hacia adelante. Entre más se aleje la cabeza de tu centro con esa presión hacia abajo, más intensa es dicha presión. Es mucho peso comprimiendo tu columna".

Aunque la mala postura no sea la causante directa del dolor de espalda, casi siempre se recomienda adoptar una buena postura para aliviarlo.

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Según Karena Wu, fisioterapeuta, "la postura es un componente importantísimo de la rehabilitación y de la vida. Siempre les decimos a los pacientes que pongan más atención a su postura, lo que significa que es una decisión consciente, como llevar una dieta o hacer un cambio de estilo de vida".

En algunos estudios recientes se ha relacionado la postura con el estado de ánimo, la memoria, la conducta y la autoestima.

Lee: Claves para usar tu cuerpo y mejorar tu comunicación

En un estudio que se publicó recientemente en la revista Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, se demostró que cuando las obligaban a sentarse erguidas, las personas con depresión de leve a moderada mejoraban.

¡Enderézate!

Aunque el tener una postura perfecta suele hacer que uno se sienta más poderoso y con más energía, es más fácil decirlo que lograrlo.

Para mí, sentarme y estar de pie "correctamente" es decididamente agotador y parece una rutina de ejercicios. Pero claro: no podía faltar una aplicación para eso.

Si buscas "postura" en la tienda de aplicaciones, encontrarás montones de apps diseñadas para ayudarte a lograr una alineación adecuada. Las aplicaciones como PostureScreen, PostureZone, Posture Aware y iRehab ayudan a los usuarios a estar conscientes de su cuerpo y a fortalecerse con ejercicios personalizados, recordatorios, registros y videos.

Una de las aplicaciones, llamada Lumo Lift, es única porque se combina con un dispositivo vestible diseñado específicamente para corregir tu postura de pie. El sensor, que cuesta 80 dólares (alrededor de 1,600 pesos), se adhiere magnéticamente a tu ropa y zumba cada vez que te jorobas. También se conecta con una aplicación en tu smartphone para que puedas llevar registro de tu postura a lo largo del tiempo.

"Estamos diseñados para ser cazadores y recolectores ; nuestro cuerpo está diseñado para moverse", dijo Monisha Perkash, fundadora de Lumo Lift. "Pero como tenemos todas estas computadoras y aparatos, estamos sentados y mal sentados, o estamos mal parados, y eso genera un problema".

Sin embargo, Perkash cree que hay esperanzas para nuestra columna. "Nuestro cuerpo se adapta tanto a las influencias positivas como a las negativas. Si pasas largos periodos jorobado, tu cuerpo cree que eso es lo normal, pero puedes revertirlo y enseñarle cuál es la buena postura. Después de un rato, la memoria muscular entra en acción y ya ni siquiera tienes que pensar en ello".

Sin embargo, Wu no cree que los dispositivos y las aplicaciones para la postura sean el único antídoto para los problemas de postura de Estados Unidos.

"El riesgo de depender de un dispositivo es que tienes que acordarte de cargarlo, tienes que acordarte de ponértelo y de usarlo", dijo. "Puedes ignorar los estímulos sensoriales una vez que te acostumbras a ellos; puedes simplemente ignorarlo y seguir en la misma posición porque sabes que tienes que seguir trabajando".

Wu cree que lograr una buena higiene postural exige un esfuerzo consciente de sentarse bien erguido.

Existen algunos métodos rudimentarios para crear buenos hábitos posturales, tales como el Método Alexander. Se trata de un proceso que ayuda a realinear la postura con plena consciencia. La suelen usar los actores y usualmente hay un asesor involucrado.

Newitter usa el Método Alexander y, al igual que Wu, cree que las aplicaciones y los dispositivos para la postura tienen un efecto limitado. "Me parece que algunos de los métodos de alta tecnología no llegan a la raíz del asunto, que es el hábito y que la gente de hecho no puede sentir lo que pasa en su cuerpo cuando tienen mala postura".

Lee: Yoga en la oficina, cinco posturas para reducir el estrés

Sin embargo, Newitter cree que si se combina con cambios en el estilo de vida y enfoques conscientes respecto a la corrección de la postura, estos dispositivos y aplicaciones tienen un efecto duradero en la salud postural. "El dispositivo recordatorio puede ser verdaderamente útil". Esencialmente, estos dispositivos y aplicaciones hacen las veces de mamá latosa.

Mi experiencia al usar el Lumo Lift fue aleccionadora. Siempre he estado consciente de mi perfil jorobado, pero el zumbido constante me hizo darme cuenta del extremo al que llega. No uso el dispositivo todos los días. Olvido en dónde lo dejo. Olvido cargarlo. La mayoría de los días simplemente no tengo ganas de ponérmelo. Pero la experiencia me ha ayudado a estar bien consciente de que tengo que corregirme, de que debo ser mi propio policía de la postura, por decirlo así. Y mi deseo de enderezarme nunca ha sido más intenso.

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