Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Comprobantes fiscales ahora digitales

La emisión de documentos en papel se queda atrás para 20,000 empresas que usan la nueva tecnología; Wal-Mart, Costco, Liverpool y Altos Hornos de México ya han optado por este sistema de facturación.
dom 02 agosto 2009 06:00 AM
La gestión de una factura digital cuesta 30 pesos máximo. (Foto: Archivo)
internet (Foto: Archivo)

Domingo en la sucursal Tlalnepantla de Home Depot. Los clientes que necesitan factura se formaban en el área de servicio a clientes. Pero desde mayo todo cambió: un quiosco electrónico imprime el documento, y en lugar de las leyendas de registro del impresor autorizado ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), sólo tiene dos espacios llenos de números, letras y caracteres.

Un documento llamado Comprobante Fiscal Digital (CFD) comienza a extenderse entre los contribuyentes. Emitido inicialmente por 900 grandes firmas, que usan un sistema electrónico de facturación impulsado por el SAT, promete abatir la impresión y el almacenamiento de papeles fiscales.

Miguel Ángel Peralta, director general de la Asociación Mexicana de Estándares de Comercio Electrónico (AMECE), explica que, “tras la adopción del código de barras (en los años 90), llegó la necesidad de darle validez legal a las transacciones electrónicas”. En 1997 arrancó el proceso para reformar leyes como los códigos Civil, Mercantil y Penal y validar jurídicamente documentos electrónicos.

Con la participación de organizaciones como el Colegio de Notarios y la Barra de Abogados, el SAT emitió en 2004 las reglas de operación del CFD, que culminaron en junio de 2008. Según la AMECE, 70% de las 1,300 empresas bajo este esquema, entre las que se encuentran Wal-Mart, Costco, Liverpool y Altos Hornos de México, habían optado por hacer la transición al mundo digital.

Mauricio Reyes, director general de la firma Arquitectos en Soluciones Informáticas (ASIWARE), muestra en pantalla archivos etiquetados XML que, a primera vista, parecen números y letras sin sentido. Un par de clics después aparece la imagen de una factura. Sin embargo, ésta tiene dos elementos diferentes a las facturas tradicionales: “El primero se llama cadena original, es la información de una factura: datos del cliente, del receptor, subtotales y totales”. El segundo es “un sello digital proporcionado por el SAT, único por cada contribuyente”.

Dime cómo facturas...
Lo que sucede tras bambalinas es sencillo: el sistema de contabilidad de la empresa, en lugar de imprimir la factura, crea un archivo que combina datos de la compra con el sello digital. El archivo puede convertirse en un documento gráfico (e imprimirse en un quiosco, o descargable desde un sitio web), pero el emisor puede guardar los archivos digitalmente, ahorrando así los costos relacionados con mantener por cinco años las hojas de papel, como lo ordena el SAT.

Publicidad

Esto no es menor. Uno de los clientes de ASIWARE, las gasolinerías Hidrosina, emite unas 300,000 facturas mensuales. Y aunque podría pensarse que sólo una gran compañía tiene capacidad para invertir en este proceso (que cuesta entre 2 y 30 pesos por gestión de cada factura), pyme vinculadas con el primer grupo de pioneras (aproximadamente 20,000 empresas) ya están emitiendo sus CFD. Una de ellas es RocaHijos, joyería que implantó el CFD por su relación con uno de sus clientes.

Ivonne Carvajal, directora administrativa de la compañía, cuenta que “Liverpool nos invitó hace cuatro años para que entráramos a este esquema”. En una semana habilitaron el sistema: “Copias tus remisiones en una carpeta del sistema de administración. Lo entregado en la semana se factura en lunes; se ‘jala’ el archivo y se generan las facturas electrónicas”, explica la ejecutiva. Con esto se evita un problema a la hora de facturar: aclaraciones y notas de crédito que se deben realizar si la mercancía llega incompleta o dañada.

A decir de Rubén Herrero, director general del portal fiscal Impuestum, “bajo el CFD, las facturas deben emitirse inmediatamente, pues se expiden con la fecha en que la estás mandando. Si quieres cancelar un folio debe ser dentro del mes del folio, porque cada mes tienes que enviar al SAT un reporte de folios expedidos”.

Herrero vislumbra un futuro en el que otros documentos fiscales serán digitales, como los recibos de nómina, que en el largo plazo podrían vincularse con sistemas biométricos que remplacen la firma escrita, algo que hoy no está contemplado en la ley laboral.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad