Mercado del azúcar blindado en México
El dicho popular dice que una vez ahogado el niño se quiere tapar el pozo, sin embargo, después de años en los que ya era demasiado tarde para rescatar al niño, el mercado mexicano del azúcar por primera vez está blindado contra el desabasto y movimientos bruscos en los precios internacionales. Así, aunque para 2010 se espera un déficit mundial del endulzante, el país no tendrá problema alguno.
Desde que comenzó 2009, India y China, dos de los grandes productores de azúcar en el mundo, registran bajas en su producción provocadas por el cambio climático, la reducción en la superficie cultivable y la escasez del crédito.
Mientras tanto, la demanda sigue en aumento, lo que “puede llevar a un déficit mundial que podría durar dos años”, advierte Chris Mann, analista de Traders8, consultoría de EU especializada en mercados agropecuarios.
Las estimaciones de la Organización Internacional del Azúcar apuntan a que, a partir de septiembre próximo, el consumo global del producto crecerá 2.4% para llegar a los 165.9 millones de toneladas, mientras que la producción caerá 3.8% para quedar en 162.3 millones de toneladas anuales.
Ante este panorama, Brasil, Tailandia, Australia, México, Guatemala, Colombia y Argentina se perfilan como los únicos capaces de satisfacer su demanda interna e, incluso, reportar excedentes exportables. Juan Cortina Gallardo, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Azucarera y Alcoholera en México, explica que desde el año pasado se tomaron medidas para evitar desabasto, como adelantar la zafra 2009-2010.
La producción de azúcar en México es de 5.5 millones de toneladas y el consumo llega a 5.0 millones. Para evitar la escasez se buscará tener una reserva de entre 100,000 y 200,000 toneladas, según Cortina.
Asegura que las reformas hechas al mercado nacional a través del Programa Nacional para la Agroindustria de la Caña en 2007, que marca la modernización del sector, no sólo han permitido controlar el precio del azúcar, sino también ordenar la producción, volver autosuficiente al país, detener el contrabando y exportar excedentes.