Renuncian a empleo de ensueño y triunfan

Víctor Calderón y Arturo Merino tenían un trabajo de ensueño antes de cumplir 30 años. Ambos financieros con posgrado, eran los ejecutivos de banca corporativa más jóvenes de Scotiabank en México. Manejaban cuentas millonarias de clientes de Nueva York.

Pero la inquietud por echar a andar un negocio propio los hizo renunciar y fundar en julio de 2004 ArCcanto, una firma de asesoría financiera integral y gestoría de financiamiento dirigida a pyme, algo que no existía.

La idea fue un éxito. ArCcanto se constituyó como un agente que enlaza las necesidades de financiamiento de las pyme con potencial, con los requerimientos de la banca y otros intermediarios financieros, como sofomes, arrendadoras y firmas de factoraje.

En cinco años, han apoyado a más de 650 empresas y colocado financiamientos por más de 1,000 millones de pesos, buena parte para capital de trabajo.

También ofrecen una gama de productos que usualmente sólo son accesibles para grandes empresas como créditos sindicados.

La imprenta Grupo Fogra, que tenía una abultada deuda en euros, siguió el consejo de ArCcanto para adquirir un swap (intercambio) y cambiar su deuda a pesos y a tasa fija. Fue la mejor solución.