Lorenzo Zambrano, visionario y operador

He tenido la oportunidad de conocer y de tratar al Ing. Lorenzo H. Zambrano desde 1985, primero, como un fuerte impulsor del Tecnológico de Monterrey y de otras obras relacionadas con la cultura y la educación; en segundo término, lo he conocido como presidente del Consejo del Tecnológico de Monterrey desde agosto de 1997, lo cual me ha permitido identificar algunos rasgos de su liderazgo.

Quizás la característica más importante en su liderazgo es el don de tener una visión estratégica y, al mismo tiempo, la capacidad de enfocarse a aspectos importantes de la operación.

Me ha tocado, en el caso del Tecnológico, verlo cómo dedica muchas horas de su tiempo para discutir con los directivos del Instituto la visión estratégica y simultáneamente cuestionarnos aspectos importantes de la operación. Generalmente las personas tienen la visión de la meta hacia dónde debe y puede ir la organización, pero carecen de la capacidad de ser operadores, o viceversa; en el caso del ingeniero, él tiene el don de dominar ambos aspectos.

Otro aspecto de su personalidad es que, además de atender la organización que dirige, tiene la generosidad y la visión para atender aspectos que son importantes para la sociedad, como son la educación y la cultura. Muchas veces el trabajo diario en nuestras organizaciones absorbe totalmente nuestro tiempo y no nos permite dedicar parte de éste a crear una mejor sociedad.

Otro rasgo muy importante de su liderazgo es su determinación, serenidad y optimismo con que ha sabido enfrentar los diferentes retos que se le han presentando. Él tiene claro que los retos y las crisis son siempre fuente valiosa de aprendizaje y que con talento y dedicación saldremos siempre adelante. Esto significa para mí que él tiene la confianza de que los retos se irán solucionando con dedicación, inteligencia y optimismo.

Rafael Rangel Sostmann es rector del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey