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Coahuila y Jalisco atraen más inversión

Ambos estados destacan en el informe de “Los Mejores Lugares para Invertir” de la revista Expansión; el primero gracias a la exportación automotriz y el segundo gracias a la diversificación.
lun 19 octubre 2009 06:00 AM
Luego de varios periodos de paros técnicos, la planta GM en Ramos Arizpe, Coahuila, ha vuelto a la normalidad.  (Foto: César S. Majarrez)
planta GM (Foto: César S. Majarrez)

A un año del estallido de la crisis económica, la más severa en las últimas siete décadas en México, algunos estados han comenzado a ver la luz al final del túnel.

Impulsados por la incipiente recuperación de la economía estadounidense o favorecidos por programas de gobierno locales, entidades como Coahuila y Jalisco están capoteando la recesión, según un análisis y una investigación de Expansión.

Aunque no han sido inmunes al desempleo y a la caída en las ventas minoristas en lo que va del año, ambos estados han logrado atraer inversiones extranjeras y figuran entre las entidades más activas en cuanto a la suscripción de créditos empresariales y del Infonavit para adquirir vivienda.

En contraste, Baja California y Chihuahua registraron los mayores índices de desempleo en los primeros ocho meses del año (8.5% y 12.9%, respectivamente); además, tuvieron caídas superiores a 50% en la captación de inversión extranjera directa en el primer semestre.

Los nubarrones que en la primera mitad de 2009 entristecieron la región de Saltillo y Ramos Arizpe –el mayor cluster automotor del país– empezaron a disiparse gracias al repunte de las ventas de autos en Estados Unidos, a partir de julio.

La economía de Coahuila está orientada a la industria automotriz y ésta, a su vez, a la exportación. Luego de varios periodos de paros técnicos, las operaciones de Chrysler y General Motors en la región empezaron a repuntar, gracias al plan de subsidios de 3,000 millones de dólares del gobierno estadounidense para impulsar las ventas de autos nuevos.

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“Ése es uno de los (dos) factores que han sido fundamentales para que Coahuila se esté recuperando rápidamente de la crisis”, dice Marco Durán Flores, subsecretario de Desarrollo Económico del estado.

Arnoldo Ochoa, doctor de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Coahuila, indica que hay leves indicios de una recuperación, como nuevas inversiones en el estado, aunque advierte que todavía no hay que echar las campanas al vuelo. “Es muy pronto para pensar en una mejora económica sostenida”, dice el académico.

A finales de febrero, Daimler Trucks Norteamérica inauguró en Saltillo su segunda planta de ensamble de camiones en México, una instalación en donde invirtió 300 millones de dólares (MDD) y que tendrá capacidad para producir 30,000 tractocamiones al año de su marca Freightliner. La planta empleará a 1,600 personas, entre técnicos y administrativos, y generará 1,100 empleos indirectos, entre los proveedores locales.

En el verano, la empresa china Golden Dragon Copper, una de las firmas líderes en fabricación de tubos de cobre en el mundo, inauguró en Monclova una fábrica de tubos para la construcción y aparatos electrodomésticos. La planta producirá hasta 70,000 toneladas y generará 900 empleos; la inversión rebasó los 100 MDD.

Otro de los factores que está impulsando la economía local es la inversión en obra pública del gobierno estatal, que destina hasta 25% del presupuesto a la infraestructura. En los últimos tres años, se invirtieron casi 7,000 millones de pesos en el rubro, lo que benefició a la construcción.

“La inversión en carretera, vivienda, puentes no se frenó con la crisis económica global, esto ayudó a Coahuila a amortiguar los efectos de la recesión”, comenta Durán Flores.

Una de las mayores obras de infraestructura está por inaugurarse: la nueva autopista de peaje Saltillo-Monterrey, cuya concesión fue obtenida por la firma española Isolux Corsán. La carretera ayudará a agilizar el transporte de productos de Coahuila a la frontera de Nuevo Laredo, y de ahí a EU.

Amortiguador de crisis

En el occidente del país, Jalisco protagoniza otra historia de recuperación, aunque diferente. Gracias a la diversificación de su economía, a negociaciones entre empresas y trabajadores y a condiciones favorables para la industria electrónica, la entidad logró evitar un alto desempleo y capta inversiones.

El índice de desocupación en Jalisco en el primer semestre fue de 1.7%, casi la mitad del promedio nacional (3.3%). Y empresas del sector de electrónica anunciaron inversiones de diferentes magnitudes.

Hewlett-Packard inauguró en agosto en Guadalajara un centro de servicios para brindar atención a sus filiales de todo el continente en las áreas de crédito, cobranza y planeación financiera. Invirtió 7 MDD y creó 240 nuevos empleos, a los que se agregarán en breve otros 130, todos calificados.

Jabil Circuit, por su parte, anunció una inversión por 80 MDD en su planta de Zapopan, donde manufactura el teléfono inteligente BlackBerry.

A diferencia de otros estados cuya economía depende de la exportación a Estados Unidos, Jalisco está más diversificado, lo que ha sido un amortiguador durante la crisis. “Somos el estado con más micro y pequeñas empresas en diversas áreas de la economía y eso nos hace diferente a otros con una gran industria exportadora, en donde de inmediato se perdieron miles de empleos”, dice Alonso Ulloa, secretario de Promoción Económica de Jalisco.

“Los estados que más perdieron empleos fueron los más vinculados a la economía estadounidense, como Nuevo León. En cambio, nuestras pymes están más ligadas al mercado interno”, coincide Pablo Lemus Navarro, presidente del Centro Empresarial de Jalisco, capítulo local de la Confederación Patronal de la República Mexicana.

Además, en Jalisco se originó el primer plan estatal de protección al empleo. A menos de dos semanas de que estallara la crisis cambiaria, en octubre de 2008, empresarios, trabajadores y gobierno firmaron el Acuerdo para el Fortalecimiento de la Economía y el Empleo en Jalisco.

Un aspecto importante del pacto fue una flexibilización de las condiciones laborales en las empresas jaliscienses, de tal manera que se permitió la reducción de las jornadas de trabajo a cambio de conservar la plantilla laboral. “Esto lo hicimos con una relación de confianza entre sindicatos y empresas”, señala Lemus.

El gobierno estatal se comprometió a invertir cuando menos 10,000 millones de pesos en obras de infraestructura y a la fecha se han otorgado 18,000 créditos para mipymes de una meta de 20,000. “En el aspecto económico, en Jalisco estamos haciendo bien las cosas”, concluye Lemus.

 

Con información de Ana Lilia Martínez y Cyndi Hernández

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