"No somos tontos. Comercio y derechos
1. A cuatro años del Tratado de Libre Comercio México-Unión Europea. ¿Cuál es el balance?
Hay problemas con la uniformidad de estándares y con los flujos de inversión. También es indispensable que en México se apoye más a las pequeñas y medianas empresas, para garantizar que todas puedan explorar posibilidades en la cadena comercial.
- 2. Las exportaciones mexicanas a la UE están estancadas pese al Tratado ¿Por qué el mercado europeo sigue sin atraer a los mexicanos?
No por tener un tratado se van a incrementar de inmediato las exportaciones, eso toma tiempo. Detrás del problema están los altos estándares que impone la UE, que no son los mismos que hay en México. Y algo similar sucede cuando los europeos quieren exportar ciertos productos a México, cuyos estándares están muy ligados a los de Estados Unidos.
- 3. ¿Cómo ayudará esta nueva legislatura del Parlamento Europeo a destapar esas arterias comerciales?
Hemos pedido información a nuestros expertos para analizarla entre eurodiputados y así poder formular recomendaciones, las cuales vamos a discutir con la Comisión Europea y con la embajada mexicana. Además, en 2005 vendrán legisladores mexicanos y luego iremos nosotros para estudiar juntos y sobre el terreno cómo derrumbar esas barreras comerciales.
- 4. ¿Qué gana México al gestionar mejor el TLCUE?
Al solucionar sus obstáculos comerciales con la Unión Europea, México logrará construir su propio modelo en América Latina. Así, fortalecerá su posición como socio geopolítico y como economía global, y aumentará su liderazgo entre los países en desarrollo, sobre todo en la región. México puede potenciar su “rol específico” en el mundo.
- 5. Para la UE el comercio y los derechos humanos van de la mano ¿México está respetando este principio? Ha habido críticas del Parlamento.
Para nosotros el tema es fundamental. Pero debemos reconocer que no todos los países parten del mismo nivel, aunque hayan firmado un tratado con la UE. No somos tontos. Pero sí tenemos que ver progresos. Las dificultades económicas internacionales han afectado a países como México, que atraviesa un periodo difícil. Sin embargo, no puedo imaginarlo dando un paso atrás en su democratización.