A prueba con la reforma fiscal
Los políticos de México intentan hilvanar un paquete de reforma fiscal que incluiría la reducción drástica de los vacíos en los impuestos corporativos y la introducción del IVA (a tasa baja) en medicinas y alimentos básicos.
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Este paquete será una prueba de la habilidad de México para estimular su economía y de la decisión del PRI de actuar constructivamente con un Presidente de otro partido.
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En 2001, Vicente Fox hizo de la reforma fiscal su prioridad y la pieza central era introducir el IVA a medicinas y productos alimenticios básicos a 15%. Eso hubiera incrementado en forma precisa la base fiscal del país, la cual –con 12% del PIB– es una de las más bajas en América Latina. Pero el plan se colapsó en el Congreso, con la oposición del PRI.
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La nueva legislatura, en la que este partido casi tiene mayoría, emprenderá la reforma fiscal en septiembre. El objetivo es acordar un programa al mismo tiempo que el presupuesto de 2004, el cual debe convenirse para fines de diciembre.
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Se piensa que un elemento clave de este paquete será el gravar con el IVA alimentos y medicinas, pero a una tasa menor de la que se propuso previamente –quizá 5 o 6%–. Al parecer, el punto de vista de Hacienda es que la reforma fiscal sin incrementos en los impuestos indirectos sería poco efectiva. Una propuesta es acoplar esto con una reducción del IVA en otros productos, aunque ahora los patrocinadores de la idea creen que esto puede evitarse.
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Un factor adicional consistirá en elevar los impuestos en las corporaciones, probablemente a través de la eliminación de las fallas. Eso facilitaría vender la reforma fiscal al público, ya que el último paquete se percibió como injusto para los pobres.
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Diversos hombres de negocios han manifestado su preocupación de que el gobierno no esté gastando lo suficiente para estimular la economía, la cual ha sufrido por la deceleración de Estados Unidos.
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Nicholas Stern, economista en jefe del Banco Mundial, dijo durante una visita al DF que la nación necesitaba invertir en infraestructura, educación y capacitación si quería seguir siendo competitiva con países como China. "Para eso se requieren ingresos, y eso significa reforma fiscal –afirmó el directivo–. México tiene un impuesto muy bajo para un país de ingreso medio."