Marineros y estibadores poco a poco se acostumbran al hueco que dejó el -barco Mary Nour, que al fin zarpó de Altamira rumbo a África. El buque –propiedad -de Compañía para el Desarrollo de México (CDM) y cargado con 26,000 toneladas -de cemento ruso que pretendía importar– quedó varado 11 meses, tras un -embargo aduanal. Todo empezó con un amparo interpuesto por Cemex, en el que -citó al barco como obstáculo a la navegación en Tampico.
- El barco tuvo que ir a Altamira, donde cayó en una trampa regulatoria, pues -no tenía permiso para descargar cemento.
- Lorenzo Zambrano, propietario de la cementera mexicana, dijo a Expansión -en octubre de 2004 que “la industria del vestido por no defenderse a tiempo, -casi ha desaparecido (…) Nosotros nos defenderemos dentro de la ley”.
- CDM señaló que sus pérdidas ascendieron a $42 millones de pesos.