Con el brindis de fin de año, las fronteras mexicanas se abrirán a la -avalancha de computadoras usadas como parte del TLCAN. Esto ocurre mientras el -mercado mundial de PCS se recupera (después de tres años de estancamiento) y -el ciclo de renovación de equipos se incrementa. “México será un atractivo -destino para ello”, comenta Luis Anavitarte, vicepresidente y director de -Investigación en Gartner, empresa de análisis de mercado de las tecnologías -de la información (TI).
- En el país, donde la base instalada de PCS es de nueve millones, las de -segunda mano podrían tener mayor aceptación en los hogares y las PYMES, lo que -afectaría principalmente a fabricantes locales. Hay mucho potencial para los -equipos usados, ya que el segmento nacional, atendido por arrendadoras, -representa sólo 10% del total del mercado de TI (hardware y software).
- Según la casa consultora, las notebooks serán las primeras víctimas. Perú -es una muestra de lo que podría pasar: en nueve meses del año los equipos de -segunda mano importados de una marca reconocida superaron las ventas de los -nuevos del mismo fabricante.
- Uno de los principales problemas es la falta de regulación sobre la materia, -que no estará lista para entrar en vigencia el primero de enero. Sin medidas -para supervisar la calidad de los equipos, “existe un riesgo latente de -convertirnos en un basurero electrónico”, advierte Edson Sánchez, analista -de Periféricos en Select.
- El especialista cree que, al menos en el corto plazo, las computadoras usadas -no representan una amenaza por falta de demanda suficiente. “Pero si ofrecen -garantías de compra y buen precio –agrega–, a mediano plazo podrían tener -aceptación en clases económicamente bajas.”