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Aventura non stop

Aeroméxico sumó una ruta para acceso directo a la zona norte de Miami.
mar 20 septiembre 2011 02:55 PM

Fort Lauderdale se ufana de haberles dicho adiós hace 15 años a los bulliciosos spring breakers, que ahora le dan vida y unos cuantos dólares al verano de Cancún, y de haberse quedado sólo con turistas que gastan más por día y, en lugar de dedicarse a beber cervezas durante una semana al año, se embarcan en lujosos cruceros o compran en el Sawgrass Mills, el mayor conjunto de outlets del mundo.

- La oficina de visitantes y convenciones de la ciudad presume cada vez que puede que con sólo prohibir que se bebiera alcohol en calles y plazas –y con vigilar que la ley se cumpliera– el puerto alejó a los estudiantes veraniegos y se convirtió en un sitio más tranquilo y adecuado para gente de mayor edad y más poder adquisitivo.

- Con el fin de atender a ese tipo de turistas mexicanos, dispuestos a gastar en los centros comerciales, abordar uno de los cruceros –Fort Lauderdale es, junto con Miami, el principal puerto de ese tipo de embarcaciones en el Atlántico estadounidense– o pasear con más tranquilidad que en la vecina South Beach, Aeroméxico inauguró un vuelo los fines de semana desde la ciudad de México.

- Rolf Hoehn, vicepresidente de la división Estados Unidos de la aerolínea, explica que el número de pasajeros de México a la unión americana ha descendido más de 15% en los últimos dos años, mientras que el llamado mercado étnico –de connacionales que van a visitar a sus parientes que trabajan del otro lado de la frontera– ha caído más de 25%. El mercado de viajeros de placer ha disminuido en menor proporción y por eso se aprovecha este tipo de rutas, agrega el directivo.

- Según dice, el vuelo a Fort Lauderdale no canibalizará las rutas de Miami, sino que también puede servir como un horario más para quienes quieran ir a ese destino, a unos 40 minutos. Las ventajas son que el aeropuerto está cerca de la zona norte (Aventura) y es más pequeño que el de Miami –aunque atiende a unos 18 millones de pasajeros anualmente– y eso hace más fácil transitar por él.

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