Azúcar y paz en el puerto

Empezando por la ubicación. Azúcar está enclavado en una pequeña localidad llamada Montegordo, cerca de Nautla y con rumbo a Poza Rica. El hotel se levanta como un oasis, aunque está perfectamente integrado con el entorno. Sólo 20 habitaciones de un estilo sobrio que mezclan lo rústico y lo minimalista. Sus muros son blancos y los toques de madera enfatizan la sensación de calidez. Los detalles en el diseño son incontables, pero lo mejor: una atención personalizada y espontánea.

- Azúcar invita a olvidarse de todo y abandonarse al descanso. Sin embargo, una curiosidad cercana que vale la pena es San Rafael, un pueblito a 15 minutos establecido por inmigrantes franceses a principios del siglo pasado. El efecto de este lugar es muy especial: los descendientes de sus primeros pobladores continúan fabricando quesos y otros productos con las fórmulas artesanales de sus antepasados, y los ofrecen a la venta en diversas tiendas y fonditas. La quesería y cremería del señor Lambert, las galletas artesanales de Raquel Maasberg, la panadería de Don Constantino... como si todo perteneciera a un tiempo que parecería haberse ido hace mucho, pero que sigue palpitando. Los que de plano prefieren actividades más “en forma” también tienen opciones: el kayak, los paseos en bici, la caminata, los paseos a caballo, y por supuesto, los rápidos. Todo, a distancias muy razonables.

- Hay dos formas de llegar a este paraíso. En coche, saliendo desde la ciudad de México rumbo a Xalapa, pasando por Altotonga, Tlapacoya y Martínez de la Torre. 20 minutos después de pasar San Rafael, hay que tomar la desviación a Poza Rica, y en el faro de Nautla, dar vuelta a la derecha. El hotel está en el kilómetro 83.5 de la carretera Nautla-Poza Rica. La otra alternativa es viajar en avioneta, saliendo del aeropuerto de Toluca (esta opción forma parte de un atractivo paquete que ofrece Azúcar, incluyendo el viaje redondo, dos noches con una cena y transporte terrestre).