En 2002 los dirigentes de Coparmex protestaban en San Lázaro por el ausentismo y la baja productividad de los legisladores. Hoy deberían hacer lo mismo en las juntas de consejos de administración de sus empresas. La imagen de las curules vacías en la Cámara de Diputados, tiene paralelo con los sillones vacíos de las salas de consejo.
- El informe anual de “Indicadores de Desempeño Legislativo de la Cámara de Diputados”, correspondiente al Segundo Ejercicio de la lix Legislatura –elaborado por el CIDE y la Fundación Friedrich Naumann– apunta que el promedio de asistencia a las sesiones fue en 2003 de 76% y en 2004 de 72%.
- En los ejercicios anuales 2003 y 2004, el promedio de asistencia de los miembros propietarios a las sesiones de consejo de las 102 empresas que participan en la Bolsa Mexicana de Valores fue de 70.8% y de 72.1% en esos mismos periodos. Quienes menos asisten a las sesiones de consejo son los empresarios o presidentes de otras empresas, que las compañías llaman como consejeros independientes para aportar su experiencia e imparcialidad. En teoría, estos consejeros independientes también son los abanderados de la objetividad y de los derechos e intereses de los accionistas minoritarios.
- Pero no sólo las ausencias los hermanan con los legisladores, en la operación de los consejos de administración también se presentan prácticas como el dedazo, el mayoriteo, la falta de respeto a las minorías y los ejercicios de simulación, que son el pan de cada día en las sesiones de consejo.
- Hoy, la Coparmex tendría que preguntarse: ¿Qué hay del otro lado del espejo?