Banamex abrió un centro comercial, una oficina de correos y hasta un salón de clases de finanzas. Cosas que se pueden hacer en la Internet.
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Es Banamex.com, un portal con servicios similares a los de StarMedia o Yahoo, pero que, según sus promotores, no busca competir con ellos.
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El banco ya tenía una página web y en noviembre la convirtió en portal, con información económica y de la bolsa de valores, servicio de correo electrónico gratuito y una plaza comercial, que por lo pronto permite entrar a 40 establecimientos, desde Liverpool hasta Mix Up.
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“Los bancos tienen que estar en Internet, aunque hasta ahora pocos han ido más allá de tener una página”, advierte Simon Ford, director de investigación de Deloitte Consulting. Y eso tiene costos, por lo que no necesariamente será una ventaja.
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Para Banamex, estar en Internet ya reporta beneficios. La sucursal virtual (Bancanet) registra más de 800,000 operaciones bancarias al mes (40% más que hace tres meses), el equivalente a 50 sucursales reales.
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Según estándares internacionales, una operación en una sucursal le cuesta al banco $0.90 centavos de dólar, mientras que en la red de redes el costo baja a $0.01 centavo, explica Eugenio Zubiría, director adjunto de Banamex y encargado del área de Negocios por Internet. “Pronto pelearemos el presupuesto con el de construcción de sucursales”, dice.
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Lo que sigue es la plaza comercial. Ahora el portal sirve como liga para entrar a las tiendas virtuales, pero Zubiría espera que en el primer trimestre del 2000 Banamex dé a sus clientes un pasaporte único, para facilitar el pago con tarjeta. El banco también ofrece asesoría para abrir tiendas virtuales. “Nos estamos preparando para darle el canal de Internet a los 25,000 negocios que ya trabajan con Banamex”, dice Zubiría.
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¿Y el salón de clases? En el portal se incluye el acceso a AcciGame, un simulador de operaciones en la bolsa de valores, que es “ toda una cátedra de finanzas”. El usuario recibe dinero virtual, con el que compra acciones.
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Cada mes, Banamex premia hasta con $10,000 pesos (esos sí, reales) a quien logre los mayores rendimientos.