El 6 de julio, el PRI, por medio de su comisión para el desarrollo del proceso interno, que encabeza Fernando Gutiérrez Barrios, fijó los topes de gastos para las Precampañas de los aspirantes a la candidatura presidencial del partido. No se han previsto sanciones en caso de que se exceda el tope.
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¿Cuánto podrá gastar cada uno de los precandidatos?
El tope es de $44.2 millones de pesos por precandidato. Cada uno podrá gastar hasta 84% de esta suma en medios electrónicos. Además se permite recibir hasta $13.2 millones de pesos en donaciones y aportaciones en especie, como casas, automóviles, aviones, etc.
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¿Quién vigilará que no haya dinero sucio?
El comité de fiscalización estableció una serie de reglas y criterios para recibir, registrar y reportar los ingresos y egresos. Se prohíben las contribuciones anónimas, pero no hay topes a las aportaciones individuales.
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¿Cómo se compara con las campañas presidenciales?
En la campaña de 1994 el PRI gastó $128 millones de pesos; PAN, $31.9 millones de pesos; PRD, $10.8 millones de pesos; PT, $2 millones de pesos y PVEM, $0.9 millones de pesos.
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¿Cuánto llevan gastado los precandidatos?
Francisco Labastida: según su oficina de prensa, entre $3 y $4 millones de pesos, la mayoría recabada en boletos de $1,000 pesos para desayunos, comidas y cenas. Manuel Bartlett: ofreció dar una cifra después del 22 de julio, pero según su oficina de prensa “no ha pagado un solo spot” en Televisa y TV Azteca, sino que ha acudido “a las amistades de los medios electrónicos”. Roberto Madrazo no ha dado a conocer una cifra oficial. Algunas agencias especializadas en medios estimaron en $122.7 millones de pesos el costo de sus anuncios televisivos de enero a abril.