Por nada del mundo, Rodolfo Adrián estaba dispuesto a sacrificar cuatro horas del sábado en un curso. Su papá lo convenció y, desde entonces, este niño de 10 años espera el fin de semana para pasar el tiempo en Semillitas, un programa de British American Tobacco (bat) dirigido a niños de cinco a 13 años.
- De las nueve a las 13 horas, Rodolfo y 93 niños más juegan y aprenden a respetar a la naturaleza. Su padre está contento con su aprendizaje: “Un día fuimos juntos al estadio y me regañó por tirar las cáscaras al suelo”, cuenta Rodolfo Martínez, supervisor de Mantenimiento en la tabacalera con 23 años de antigüedad.
- Sergio Delgadillo, socio director de la consultora de Grupo Cuadrivium, señala que, con estos programas, bat muestra congruencia de marca. Mientras hay productos con prestigio fabricados por empresas con mala reputación, la tabacalera busca además que los fumadores estén informados, que no sean menores de edad y que el buen trato a los trabajadores refuerce la imagen de la marca.
- Martínez es uno de los seis padres de familia que asisten al curso para coordinar las actividades que diseñan los estudiantes del Tecnológico de Monterrey, quienes forman un equipo de instrucción que pone en marcha una metodología desarrollada por expertos en esquemas de enseñanza de aprendizaje. De esta forma y de acuerdo con la edad, los niños aprenden liderazgo, puntualidad, limpieza y a emprender.