Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Héctor Terán Terán. &#34Privilegiar e

-
mar 20 septiembre 2011 02:54 PM

Respaldado por casi la mitad de los electores bajacalifornianos para recibir la estafeta del gobierno estatal, Héctor Terán Terán, administrador de empresas nacido hace 64 años en Sonora e iniciado en la actividad política a los 20 años en organizaciones juveniles del PAN, delinea a EXPANSIÓN la gestión de su gobierno, que inició el pasado - 1o. de noviembre y con la que comienza el séptimo de 12 años de gobierno panista en la península geográfica y comercialmente ligada a la más grande economía del mundo.

-

¿El camino para llegar a la gubernatura hubiese sido igual si el gobernador anterior no hubiera sido -panista?
-
Por supuesto que ayudó mucho que Ernesto Ruffo haya estado como gobernador, porque eso trajo confianza a una ciudadanía que estaba desalentada por el fraude electoral. En estos años se dio mi senaduría y hubo varios ejemplos electorales que dieron credibilidad. En otras elecciones dedicábamos el mayor tiempo a evitar que nos robaran votos; ahora ese tiempo rindió más porque lo utilizamos en buscar votos.

-

Pero hubo un empujón coyuntural, la devaluación, la crisis política nacional, que sin duda lo benefició.
-
Más que todo fue el deterioro creciente del sistema político mexicano, su falta de eficiencia para permitir avanzar con justicia. Estamos en un proceso de caída del partido oficial y de ascenso del PAN, por su trabajo de años. Claro, también ha tenido sus caídas en algunas regiones, pero lo veremos recuperarse en Chiapas, Aguascalientes y Michoacán.

Publicidad

-

¿Cuál es el principal problema a enfrentar una vez que tome posesión como gobernador?
-
La seguridad pública es una de las quejas que más escuchamos durante la campaña. Lo tenemos que resolver a través de una nueva legislación; crearemos una Secretaría de Justicia. En cuanto
-al narcotráfico hay que dividir las responsabilidades estatales y las federales. Al gobierno federal le corresponde la persecución de este delito, pero aún así estamos conscientes de que viene una nueva legislación, que permitirá, tanto a la procuraduría general como a las estatales, trabajar estrechamente contra el crimen organizado. La prevención sería manejada por los gobiernos estatales a través de la sociedad. En ese mismo ámbito se les daría a municipios y estados más herramientas legales para detener la venta (de narcóticos) al menudeo, pues por su aparente -"pequeñez" las autoridades federales no lo hacen con eficacia.

-

¿Se considera de mano dura para atacar al narcotráfico?
-
Haré lo posible dentro de mis facultades para atacarlo, conforme a la ley.

-

En cuanto al desarrollo económico ¿cuáles son las primeras acciones que impulsará?
-
Tenemos muchas ventajas estratégica en Baja California, pero ahora lo prioritario es que el puerto de Ensenada sea manejado por la iniciativa privada, con e fin de modernizarlo para recibir y exportar grandes cargamentos. En esa misma área, necesitamos un ferrocarril que haga conexión con Tecate, que a su vez pueda unirse a la red ferroviaria de Estados Unidos. Hay recursos e interés de varios inversionistas, lo único que falta son las licitaciones. Otra cuestión que también nos ayudará es la construcción de gaseoductos con California y Arizona. Eso abarata la energía y ayuda a impulsar otro tipo de empresas industriales que permitan exportar de acuerdo al Tratado de Libre Comercio. En ese sentido tenemos una promesa de inversión japonesa, para 1996, de $ 1,000 millones de dólares.

-

Ruffo deja una gran deuda, con lo que no podrá hacer mucha obra pública. ¿Cómo planea enfrentar esto?
-
La deuda de Baja California es mucho menor, por ejemplo, que la de Sonora, que es de N$3,000 millones de nuevos pesos. Nosotros andamos en N$350 millones. Al parecer son pasivos manejables y, claro, tenemos que ver cómo financiarla. Una posibilidad novedosa sería la emisión de bonos, pero para eso necesitamos cambios jurídicos. Sin embargo, las deudas estatales no variarán mucho si el gobierno federal no cambia su forma de distribuir las participaciones. Hay una iniciativa en la que se daría autorización a los estados para aumentar impuestos de algunos productos, pero creemos que eso no resuelve el problema de fondo, ya que finalmente la sociedad sigue pagando el costo.

-

Una de las quejas más recurrentes a Ruffo, por parte de los bajacalifornianos, fue la confrontación abierta que mantuvo con el gobierno federal a principios de su mandato. ¿Cómo añejará usted esta relación?
-
Hace poco estuve con el presidente y fue muy claro en decirme que quería una buena relación y que tenía programas importantes para el estado, por ser una zona estratégica en el desarrollo nacional. Preveo un buen trato y veo disposición para plantear lo que debe ser un federalismo. No voy a hacer una batalla solitaria contra el presidente; no será la batalla de Héctor Terán sino la del pueblo bajacaliforniano.

-

¿Se acabaron los tiempos de la confrontación?
-
Creo que es mejor privilegiar el diálogo, el acuerdo y el consenso.

-

Al pasar el poder de un panista a otro, existe el riesgo de que no haya críticas y se pasen por alto las irregularidades...
-
Vamos a dejar lo que haya funcionado y desechar lo que no funcionó, pero diremos porqué lo quitamos. Eso ya es una autocrítica. Creo que tendremos un clima más apropiado entre las fuerzas políticas para llegar a acuerdos que nos permitan cambiar la constitución bajacaliforniana, con la finalidad de establecer, por ejemplo, el referéndum, el plebiscito, el derecho de revocación. Y reformas para cambiar al gobierno, para que éste deje de ser la concentración del poder y se lo delegue a los ayuntamientos, incluso a la sociedad, si es necesario. Tengo planeado revisar el manejo de organismos como la Comisión del Agua, la Promotora (desarrollador de zonas rurales), Probursa (especializada en la Comisión del Río Tijuana). La idea es replantear si algunos servicios públicos se descentralizan hacia los municipios o se quedan en manos de la comunidad.

-

Tijuana presenta un crecimiento desbordado, ¿cómo se puede equilibrar esta anarquía urbana -que demanda infraestructura- con el desarrollo económico?
-
Necesitamos ayuda por dos lados: del gobierno federal y de las instituciones internacionales de crédito. Que se considere que a las zonas fronterizas, con sus particularidades específicas, necesitan apoyo. Debe haber un aporte especial para enfrentar la infraestructura que requiere la explosión demográfica. Tenemos un crecimiento de 5.8%. Aunque, por otro lado, Baja California es de los pocos estados donde se ha logrado que 87% de la población sea propietaria de su casa-habitación. El aumento de este porcentaje también ayuda a arraigar a los habitantes y evita la rotación laboral, tan frecuente en la industria maquiladora.

-

¿No existe el riesgo de que Baja California se convierta en un gran centro maquilador, muy importante, pero con una planta industrial local pequeña?
-
Puede haber ese riesgo, pero tenemos una gran promoción para el resto de México, para que los capitales nacionales se establezcan en la región. Algunos ya están aquí. Mexicali, de hecho, es una zona industrial por excelencia, donde se pueden combinar el capital extranjero con el nacional. Tijuana se inclina más, en efecto, a la maquiladora y al ramo turístico. En cuanto al campo, se buscará diversificarlo (hortalizas, remolacha, sorgo, eucalipto) con planes para la exportación.

-

Con el tiempo que lleva en vigencia el TLC, si estuviera en sus manos, ¿qué ajustes le haría?
-
Creo que quedó una laguna muy grande. Quedamos muy desprotegidos en áreas en que estábamos muy rezagados. En lo agrícola, por ejemplo, tengo especial interés en realizar alianzas con grupos californianos de origen mexicano para ver qué podemos hacer al respecto. Que ellos manejen el mercado y nosotros la producción.

-

¿Estaría por seguir fomentando el bloque de gobernadores -panistas?
-
Buscaré integrarme con todos los gobernadores para hacer una plataforma en común que nos permita llevar a la realidad el nuevo federalismo que queremos. Justicia en el reparto de los impuestos, en las decisiones que se toman en pesca, agricultura, comunicaciones. Queremos compartir todo eso. Claro que los gobernadores panistas tenemos una vinculación, puesto que es nuestra plataforma política, lo mismo ocurre con las presidencias municipales y con nuestros congresistas.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad